La salud de nuestros escolares: fortalezas y debilidades
La OMS en el año 1946 definía la salud como “el estado de completo bienestar físico, mental y social y no solamente ausencia de enfermedad”. Esta definición puede ser criticada y plantear controversias ya que el bienestar es subjetivo (un toxicómano siente bienestar cuando consume), tal concepto de salud es una utopía, la definición es estática y tiene un componente subjetivo.
Otra definición de salud: “es el logro del máximo nivel de bienestar físico, mental y social y de la capacidad de funcionamiento que permiten los factores sociales en los que viven inmersos el individuo y la colectividad”.
Determinantes de la salud
La salud está condicionada por la biología (y ésta por la propia genética) y sometida al envejecimiento fisiológico, el medio ambiente (contaminantes físicoquímicos, psicosociales, políticos, culturales, clima), el estilo de vida (conductas de salud) y el sistema de asistencia sanitaria.
Principales problemas de pediatría clínica y preventiva
– Patología prenatal y prematuridad: la mortalidad infantil ha disminuido en los últimos decenios pero todavía la mortalidad prenatal y perinatal sigue siendo un caballo de batalla.
– Malformaciones congénitas: una de las principales causas de la mortalidad infantil son las malformaciones del tubo neural, cardiopatías congénitas, etc. Hay que transmitir la importancia de que una mujer antes de quedar embarazada empiece a tomar ácido fólico ya que va a disminuir de manera muy significante las malformaciones.
– Patología crónica, trastornos neuropsiquiátricos y deficiencia mental: aproximadamente el 3% de la población, en mayor o menor grado, va a presentar una deficiencia mental.
– Problemas del adolescente: accidentes, trastornos psicológicos, TCA, violencia, depresión, suicidio (en España se suicidan cada día aproximadamente 10 personas y muchos son adolescentes), consumo de alcohol, tabaco, drogas, problemas sexuales y enfermedades de transmisión sexual.
– Maltrato infantil.
– Sobrepeso y obesidad.
– Trasplantes de órganos.
– Mantenimiento de altas coberturas vacunales y la incorporación de nuevas vacunas de manera universal.
– Asistencia pediátrica universal desde el nacimiento a la adolescencia para población autóctona e inmigrante.
– Hábitos saludables: dieta mediterránea y actividad física.
– Evitar los tóxicos.
– La promoción de las virtudes humanas.
Cuando analizamos la mortalidad infantil en España las malformaciones y la prematuridad constituyen una de las causas más importantes de mortalidad y esto ocurre en casi todos los países desarrollados en iguales proporciones.
Cada vez nacen más niños prematuros, actualmente alrededor de un 10% de los niños nacen antes de las 36 semanas de gestación, presentando muchas veces un peso bajo y en ocasiones muy bajo (menos de 1 kg), y con todas las patologías derivadas de la prematuridad y de la inmadurez que estos niños presentan (displasia bronco-pulmonar, retinopatías asociadas con la administración de oxígeno, alteraciones gastrointestinales, infecciones, colitis necrotizante, muerte súbita en lactante, trastornos metabólicos, apneas, lesiones intracraneales) y que condicionan la morbimortalidad de estos niños.
Anorexia y bulimia son situaciones extraordinariamente frecuentes en la adolescencia actual y que se da con más frecuencia en niñas que en niños y cada vez más jóvenes.
El inicio en el consumo de tabaco, alcohol y drogas es cada vez a edades más precoces. Los estudios indican que el consumo de alcohol, tabaco y drogas se inicia a los 13-14 años.
Hábitos de vida saludables
Los hábitos saludables hay que incorporarlos desde la más tierna infancia y deben estar relacionados con una alimentación equilibrada (cualitativa y cuantitativamente), dieta mediterránea, evitar consumo de tóxicos (tabaco, drogas y alcohol) y practicar actividad física acorde con la edad. Tal y como decía el profesor Grande Covián ” es más fácil cambiar de religión que cambiar de hábitos”.
En contrapunto a estos hábitos saludables nos encontramos: exceso de grasas en general y de grasas saturadas, de proteínas y de sal; comida basura “Fast food”; cultura del botellón (inicio en el consumo de alcohol y drogas en la preadolescencia); cultura de ausencia de valores; Internet, ordenador, juguetes electrónicos, etc (dificultad de socialización, maltrato y acoso sexual “on line”).
Lo mismo que debemos ocuparnos de la dieta de nuestros hijos, de vacunarlos, de prevenir accidentes, etc., también tenemos que ocuparnos de forma constante, incluso diaria, de su “dieta informativa” para que no tengan acceso a información que no esté relacionada con el momento de su madurez psicológica.
Obesidad infantil
La prevalencia de obesidad en la población infantil española es muy elevada según manifiesta el estudio Enkid (aunque pone de manifiesto algunas diferencias entre las comunidades autónomas) debido a una falta de hábitos y estilos de vida saludables (mala alimentación y falta de actividad física).
Algunos factores de predicción de obesidad de la población infanto- juvenil española son, según Aranceta, la falta de práctica de deporte, actividades sedentarias (ver tv más de 3 horas al día), el bajo consumo de frutas y verduras, consumo elevado de bollería, embutidos y refrescos, consumo de más de 38% de grasas, ausencia de lactancia materna, etc.
Existe “el tren obesogénico” de Swinburn que dice que existen una serie de factores que facilitan la aparición del sobrepeso y obesidad creándose un circulo vicioso del cuál es difícil salir.
La obesidad es “la madre de todas las enfermedades” ya que las complicaciones derivadas son numerosas y complejas teniendo una grave repercusión sobre los distintos órganos y sistemas. Y si no somos capaces de luchar contra el sobrepeso y la obesidad la esperanza de vida cada vez más amplia se verá en regresión.
En el estudio de los 7 países se puso de manifiesto como la dieta mediterránea tenía una serie de componentes que podían ser extraordinariamente beneficiosos para la salud de las personas. Hay estudios que muestran como países con una baja renta per capita tienen la mayor esperanza de vida, es el caso de Albania.
Dieta Mediterránea
J. Mataix decía que es “una dieta saludable en la que los alimentos que la componen están presentes en el mundo mediterráneo, con un cierto carácter ancestral”.
En el primer congreso sobre DM celebrado en Barcelona en 1996 se definió como “fusión o síntesis de todo lo que ha ofrecido la naturaleza y modificado la cultura del área mediterránea a lo largo de milenios”.
La DM además de dieta es un estilo de vida, una forma de vida, una manera de comportarse junto al consumo de determinados alimentos. Existen una serie de mecanismos fisiopatológicos asociados a la arterioesclerosis y regulados por la DM. De alguna manera nuestra edad no es la edad del carnet de identidad, sino la de nuestras arterias.
Características de la DM
– Consumo elevado de aceite de oliva y, por lo tanto, de ácidos grasos monoinsaturados, en lugar de ácidos grasos saturados.
– Consumo elevado de cereales.
– Consumo elevado de legumbres.
– Consumo elevado de hortalizas.
– Consumo elevado de frutas.
– Consumo elevado de pescado.
– Consumo bajo de carne y derivados cárnicos.
– Consumo moderado de productos lácteos, mayoritariamente fermentados y no lácteos fluidos.
– Consumo moderado de vino y otras bebidas alcohólicas.
Pero hablar de DM es hablar también de actividad física algo que no es nuevo y de lo que ya se hablaba en el año 1553 en Jaén (España).
Educación para la salud
Prevenir la obesidad pasa por conseguir un estilo de vida saludable desde niños que incluya una alimentación razonable y equilibrada y un aumento de actividad física.
La educación para la salud se podría definir como un “proceso planificado y sistemático de comunicación y de enseñanza-aprendizaje, orientado a facilitar la adquisición, elección y mantenimiento de prácticas saludables y hacer difíciles las prácticas de riesgo”.
Estas estrategias habrá que desarrollarlas a distintos niveles y habrá que investigar los problemas más frecuentes en la comunidad, indagar si existen factores condicionantes de su aparición, analizar qué conductas influyen positivamente, determinar cuáles son susceptibles de ser aprendidas y modificadas, formar educadores y técnicos y evaluar, en el corto plazo el aprendizaje de conductas, y en el largo plazo el estado de salud de la sociedad.
En el papel de educar para la salud la escuela tiene una importancia trascendental y actúa como complemento de la familia ya que garantiza el acceso y la continuidad de las acciones en un plazo adecuado, y asegura le receptividad ante las actividades educativas.
La comunidad escolar en su conjunto constituye un escenario ideal para facilitar el apoyo social a las prácticas de salud a través de la aceptación de un grupo de iguales y permite la adquisición de hábitos saludables en edades tempranas de la vida.
Recomendaciones dietéticas en la infancia para la prevención de enfermedades
-Reducir la ingesta total de grasa al 30-35% del total de las calorías.
-Reducir la ingesta de ácidos grasos saturados a menos de 7% y la de colesterol menos de 200-300 mg/día.
-Consumir pescado, pollo (sin piel), carne magra y legumbres, hortalizas, frutas, verduras y aceite de oliva (DM).
-El consumo de HC complejos debe ser del 55% del total de calorías y la de azúcares simples no debe superar el 10-15% del total.
-Moderar el consumo de proteínas, siendo éstas preferentemente de origen vegetal.
-Consumir una dieta variada con la proporción de principios inmediatos adecuada (50-55% HC, 30-35% grasas y 10-15 % proteína).
-Evitar tóxicos: drogas, tabaco, alcohol (sólo en pequeñas dosis).
-Limitar la ingesta de sal (menos de 3gr/día).
-Mantener la ingesta de calcio, vitamina D , flúor y minerales.
-Promover la actividad física a través del deporte y la socialización.
Según las previsiones de los sociólogos, los hijos de nuestros hijos podrían tener una esperanza de vida de 120 años por lo que es absolutamente necesario mantener una excelente calidad de vida durante muchísimo tiempo.