Las claves de la fragilidad ósea: la osteoporosis
Mientras leías este titular, un hueso se rompía en el mundo. La fragilidad ósea, la osteoporosis, debilita la estructura humana en la tercera edad, a partir de los 65 años.
Según la Asociación Española contra la Osteoporosis (AECOS), tres millones de personas padecen esta dolencia en España. De ellas, más de dos millones son mujeres.
En su Día Mundial, 20 de octubre, el doctor Luis Arboleya, reumatólogo del Hospital Universitario Central de Asturias, reivindica “que la salud ósea se tenga en cuenta al mismo nivel que la salud cardiovascular”.
Qué es y a quién afecta
La osteoporosis, define el doctor Arboleya, es la enfermedad que explica la fragilidad óseapor la que, ante traumas mínimos o incluso en ausencia de ellos, el paciente se fractura vértebras, muñecas o cadera, entre otros.
A nivel molecular, el hueso está en constante “formación y destrucción”. La osteoporosis se produce cuando este equilibrio se pierde en favor de la destrucción ósea.
El reumatólogo explica que existe una osteoporosis involutiva, asociada al paso inevitable de la vida y la edad, en la que se encuentran dos perfiles fundamentales:
– Mujeres a partir de los 65 años a las que el déficit de estrógenos de la menopausia les provoca osteoporosis. Según el doctor Marcos J. Cuerva, ginecólogo del Hospital Quirón San José, estudios basados en densitometrías estiman que más del 40% de las mujeres españolas entre los 70 y los 79 años padecen ya osteoporosis.
– Hombres y mujeres en edades muy avanzadas, osteoporosis dentro de un cuadro general de envejecimiento. El doctor Arboleya insiste en que las mujeres prestan más atención a esta enfermedad y toman más medidas preventivas que los hombres, “que también tienen osteoporosis, pero no conciben esa idea y no se cuidan”.
Las fracturas más comunes se producen en vértebras dorsales y lumbares, cadera, cúbito, radio, húmero y en muñeca (fractura de Colles).
Por otra parte, una zona del cuerpo planta cara a la osteoporosis y no se rinde ante ella: el cráneo. “Hay una especie de sabiduría biológica y curiosamente los huesos del macizo cráneofacial no se vuelven frágiles”, destaca el especialista Arboleya.
Prevención, detección precoz y tratamiento
El doctor Cuerva hace especial énfasis en la prevención: “Desafortunadamente, seguimos observando mujeres que acuden a urgencias por fracturas osteoporóticas que no habían recibido ningún tratamiento previo y desconocían su situación”.
“Si conseguimos que todos hagan las medidas preventivas, conseguiríamos reducir el nivel de fracturas en el 50% y tendría una importancia sociosanitaria tremenda”, añade.
Por parte del personal sanitario, el reumatólogo advierte de un fallo en la detección de la osteoporosis, pues se estudia “a la población equivocada”. Las medidas preventivas y las pruebas diagnósticas se aplican a la franja de edad de 50 a 65 años, cuando en realidad el grupo diana está a partir de los 65.
Recordando el proceso molecular de la osteoporosis, el doctor Arboleya señala que existen dos tipos de tratamiento: antiresortivos, que frenan la pérdida ósea cuando la osteoporosis no está muy avanzada, y osteoformadores, para casos más avanzados que favorecen la formación ósea. Estos últimos son los “ideales”, aunque son más caros y requieren la aplicación de una inyección subcutánea a diario.Las pruebas diagnósticas deberán realizarse analizando la historia individual y atendiendo a distintos parámetros: “La densitometría mineral ósea aporta datos objetivos para un mejor diagnóstico y un seguimiento posterior, pero también son relevantes los marcadores analíticos de los niveles de Vitamina D, los de remodelado óseo y un largo etcétera”, refiere el doctor Cuerva.
Carmen Sánchez, tesorera de la Asociación Española contra la Osteoporosis, traslada a EFEsalud que una de las demandas principales de la enfermedad es la de “una historia clínica completa” e individualizada a cada paciente.
Cada vez vivimos más, pero no sirve de nada sin aquello que nos mantiene en pie, el esqueleto, está debilitado. Dieta saludable, lácteos y ejercicio son fundamentales para unos huesos de hierro a prueba de fracturas.
Fuente: http://www.efesalud.com/
FOHEMO lanza su nueva campaña para fomentar la concienciación sobre la osteoporosis: “Tus huesos, tu segunda piel”
“Tus huesos, tu segunda piel”, es una campaña dirigida a mujeres y hombres de más de 60 años y tiene por objetivo transmitirles la importancia de prevenir las fracturas por osteoporosis. Se hace hincapié en la necesidad de cuidarse por dentro como uno se cuida por fuera, para que una fractura no repercuta en su ritmo y calidad de vida.
Pretende fomentar el diálogo entre los pacientes diagnosticados con osteopenia u osteoporosis y su médico para que éste pueda valorar su riesgo de fractura y establecer el tratamiento más adecuado.
Para hacer llegar este mensaje a la sociedad, la campaña se presentará en 10 ciudades españolas: Madrid, Santiago de Compostela, Zaragoza, Málaga, Alicante, Toledo, Bilbao, Oviedo, Sevilla y Barcelona.
En cada ciudad se instalará una carpa en un lugar céntrico, donde personal especializado realizará de forma gratuita densitometrías por ultrasonido a todos los asistentes. Además, un médico ofrecerá charlas sobre los factores de riesgo de la fractura, dará consejos para evitar caídas o accidentes domésticos así como recomendaciones sobre nutrición y hábitos saludables que ayuden a evitar la fractura. Contestará también a las preguntas de los asistentes.
Por último, habrá actividades interactivas para fomentar el conocimiento de la fractura por osteoporosis y cómo evitarla. La embajadora de la campaña “Tus huesos, tu segunda piel” es la actriz Ángela Molina, perteneciente a una conocida saga de artistas.
FHOEMO, la Fundación Hispana de Osteoporosis y Enfermedades Metabólicas, está interesada en promover el conocimiento y difusión de la fisiopatología, diagnóstico, prevención y tratamiento de la osteoporosis y otras enfermedades metabólicas óseas luchando así contra estas patologías y mejorando el tratamiento de las mismas.
En el tiempo que lleva funcionando ha realizado diferentes campañas de información a los médicos organizando conferencias para profesionales de la medicina, preferentemente en el área de la asistencia primaria, mediante el Programa CREO, divulgado también en Italia y Argentina, y el CURSO NACIONAL DE OSTEOPOROSIS. Desarrolla conferencias-coloquio de divulgación para los propios enfermos, familiares y público en general en Casas de Cultura y Centros Cívicos e imparte charlas-coloquio dirigidas a escolares informándoles sobre hábitos de vida saludables para mejorar la salud del hueso (alimentación, ejercicio, hábitos tóxicos, actitudes posturales, manejo de cargas,…).
La prevención, elemento clave en osteoporosis
La osteoporosis afecta aproximadamente a 3 millones de personas en España y es responsable de 9 millones de fracturas óseas anuales a nivel mundial en personas mayores de 50 años. “Esta enfermedad frecuente no duele pero origina problemas, como las fracturas, que provocan una gran alteración de la calidad de vida del paciente”, afirma Manuel Díaz Curiel, presidente de la Fundación Hispana de Osteoporosis y Enfermedades Metabólicas Óseas, con motivo del Día Mundial de la Osteoporosis, que se celebra este martes 20 de octubre.
El especialista ha insistido en que ante el gran impacto que tiene en el paciente es fundamental que la población aumente el conocimiento sobre esta patología e incida en la prevención especialmente sobre los aspectos que pueden propiciar las fracturas ya que, tal y como indica José Manuel Olmos, vicepresidente de la Sociedad Española de Investigación Ósea y del Metabolismo Mineral (Seiomm),“menos del 50 por ciento de los pacientes que han tenido una fractura de cadera llegan a recuperar la capacidad funcional que tuvieron previamente”.
Además, Beatriz Soto, presidenta de la Asociación Española contra la Osteoporosis (Aecos), advierte de que “los cambios de estilo de vida y el aumento del consumo de comida rápida favorecen que el hueso se deteriore”, la prevención y el diagnóstico precoz pueden cambiar esta situación.
Pero, ¿cómo se puede prevenir? Los expertos apuntan en varias direcciones:
Grupos de riesgo
La osteoporosis tiene dos grandes grupos de riesgo: las personas que hayan sido o son anoréxicas y la llegada de la menopausia. En ambos grupos los efectos de la osteoporosis se producen más rápido que en el resto de la población. Además, el riesgo aumenta en mujeres menopáusicas y con un tratamiento con corticoides. Es fundamental que éstas se realicen densitometrías con frecuencia para tomar las medidas oportunas.
Educación desde el colegio
Aunque tradicionalmente la osteoporosis ha estado relacionada con una enfermedad que afecta especialmente con la llegada de la menopausia, Soto insiste en que es fundamental que la prevención empiece desde el colegio: fomentando el deporte, una buena alimentación, etc.; “Así conseguiremos que el cuidado posterior sea mayor”.
Alimentación
“Párate en la primera fractura, que tu primera fractura sea la última”, recuerda Carmen Sánchez, presidenta de honor de Aecos. Sánchez indica que la alimentación juega un papel crucial para evitar las fracturas y respalda una cocina osteosaludable, como la dieta mediterránea, con productos ricos en calcio y vitamina D. Los lácteos, el brócoli y el perejil, destacan por su alto contenido en calcio.
Pero, ¿y si la mujer es intolerancia a la lactosa? En estos casos Soto indica que la leche sin lactosa o de soja contiene calcio, aunque ojo, insiste en que es mucho mejor la desnatada.
Fracturas
La prevención de las fracturas es quizá la pata más importante. En la actualidad, los ingresos por fracturas son mayores que por otras enfermedades como el infarto de miocardio o el cáncer de mama.
Díaz Curiel insiste en que el paciente debe conocer bien su entorno y sensibilizarse con que hay cosas a su alrededor que provocarán que haya más riesgo de fractura. En este sentido, Olmos matiza que las fracturas se producen porque el paciente se cae. “Para reducir las caídas los pacientes pueden cambiar cosas del entorno como fijar las alfombras, incluir asideros en el baño, evitar los tacones o andar descalzos con calcetines, mejorar la iluminación, etc.”.
Estilo de vida
Por último, Soto añade que si el paciente quiere tener una buena calidad de vida es su responsabilidad. El primer paso que debe dar es asumir la enfermedad, ser realista y seguir la pauta que le marque el médico. “Aunque al principio no note ninguna diferencia, las pruebas mostrarán que sí ha mejorado”.
En segundo lugar debe cambiar su estilo de vida. La familia y el entorno deben conocer que tiene osteoporosis para ayudarlo y el paciente debe modificar hasta los hábitos más pequeños. Por ejemplo, si quiere coger algún objeto de una estantería, en lugar de estirarse hasta alcanzarlo es mejor que se suba en una escalera. De esta manera estará evitando una posible caída que derive en fracturas.
Por último, deberá incluir el ejercicio físico en su rutina, dejar de fumar y reducir el consumo de alcohol.
Tus huesos, tu segunda piel
Con motivo del Día Mundial, Fhoemo, Seiomm y Aecos, con el apoyo de la Asociación Española para el Estudio de la Menopausia, la Sociedad Española de Fracturas Osteoporóticas, la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria y la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia, y la colaboración de las compañías Amgen y Ferrer, han presentado la campaña Tus huesos, tu segunda piel, con el objetivo de concienciar a los mayores de 60 años sobre la importancia de prevenir las fracturas.
La iniciativa se presentará en diez ciudades españolas, donde se instalará una carpa y se realizarán densitometrías gratuitas a las personas que acudan, se ofrecerá información sobre los factores de riesgo y se darán consejos para evitar caídas o accidentes domésticos, así como recomendaciones sobre nutrición y hábitos saludables.
Fuente: http://www.dmedicina.com/
Científicos españoles colaboran en la detección de un gen implicado en la osteoporosis
Científicos del Instituto de Investigación Marqués de Valdecilla y de la Universidad de Cantabria han participado en un trabajo que ha identificado un gen implicado en la osteoporosis. El equipo de investigadores, liderado por el doctor Brent Richards, del Lady Davis Institute de Canadá, ha localizado, cerca del gen EN1, la variante genética con la mayor incidencia sobre la densidad mineral ósea (DMO) y el riesgo de fractura conocido hasta ahora. El hallazgo se publica en Nature.
“Nunca antes se había relacionado EN1 con la osteoporosis en humanos, por lo que estos hallazgos abren nuevas perspectivas de cara al tratamiento de la enfermedad,” ha explicado el doctor Richards, profesor asociado de la McGill University.
Por su parte, el doctor y catedrático de Medicina de la UC y coordinador del equipo del IDIVAL que ha participado en el estudio, José Antonio Riancho, ha señalado que esta “rara variante” tiene una “influencia importante” sobre la densidad mineral ósea y el riesgo de fractura. “De hecho, su efecto duplica el de cualquier otra descrita anteriormente”, ha añadido el coordinador del grupo de investigadores cántabros.
El estudio, para el que se ha analizado el genoma de más de 50.000 individuos de diferentes procedencias geográficas, señala que las variantes raras pueden tener una “influencia importante” en el desarrollo de enfermedades como la osteoporosis.
Según ha declarado el Dr. Riancho, sólo a través de la colaboración de muchos grupos de investigación es posible analizar un número de pacientes “lo suficientemente grande” como para tener la potencia estadística necesaria para identificar las variantes genéticas que están implicadas en estas enfermedades complejas.
Fuente: www.jano.es/
Los genes que protegen frente a la diabetes
Científicos del Instituto de Investigación Sanitaria del Hospital Clínico de Valencia-INCLIVA, han demostrado que los genes CdK5a/2b protegen frente a la resistencia a la insulina y al hígado graso. La investigación, dirigida por la doctora Herminia González y realizada por el Grupo de Investigación de Inflamación, ha sido publicada en la revista internacional BBA, Molecular Basis of Diseases.
Según ha explicado la doctora González, “el proyecto tiene su origen en estudios precedentes propios en los que se asociaron niveles reducidos del genes IRS2 al desarrollo de resistencia a la insulina en sujetos con síndrome metabólico”. A partir de ahí decidieron estudiar en un modelo de ratón genéticamente modificado, que desarrolla resistencia a la insulina causada por un defecto en la señalización de la insulina.
En este modelo animal se observó que la sobreexpresión de dichos genes CdK2a/2b mejora el funcionamiento del metabolismo de la glucosa, reduce la resistencia a la insulina y la inflamación y protege frente al desarrollo de hígado graso. “Los resultados obtenidos nos han permitido poner en marcha una segunda fase. En esta, se está investigando en pacientes la interacción de estos dos genes”, ha relatado Herminia González.
Según la investigadores, “si los resultados se confirman, se abre una vía terapéutica basada en la modulación de dichos genes con el fin de reducir la resistencia a la insulina y la diabetes asociada a ésta”.
La diabetes es una enfermedad crónica en la cual el cuerpo no puede regular la cantidad de azúcar en la sangre como consecuencia de un mal funcionamiento del páncreas, el cual no segrega correctamente insulina (que es la hormona que controla el azúcar en la sangre). En España se calcula que el 12% de la población padece Diabetes tipo 2.
La importancia de esta enfermedad se debe no solo a su alta prevalencia, sino también a las devastadoras complicaciones crónicas que ocasiona, a su elevada tasa de mortalidad y al enorme coste que supone a los sistemas nacionales de salud.
Fuente: http://www.canaldiabetes.com/
Tratamientos para la retinopatía diabética
Existen varios tratamientos para la retinopatía diabética cuyo objetivo principal es el de es mejorar la calidad de vida y reducir el deterioro visual a través de una detección precoz. Los tratamientos dependen del grado en el que se encuentre dicha patología.
Un tratamiento adecuado y un seguimiento correcto de la retinopatía pueden llegar a reducir el riesgo de ceguera, uno de los más temidos por las personas con diabetes, hasta en un 95% de los casos.
Desde IMO nos explican que existen diferentes alternativas de tratamientos para la retinopatía diabética. Básicamente resumidos en tres grandes grupos:
1 La Fotocoagulación con láser (cuando no hay hemorragia en el humor vítreo).
2 Las Inyecciones intravítreas.
3 La Vitrectomía (cuando la hemorragia es grave y hay mucha sangre en el espacio vítreo)
Fotocoagulación con láser
La técnica consiste en aplicar láser sobre zonas de la retina dañadas para tratar o prevenir problemas retinianos. Se realiza en multitud de patologías de la retina, tanto en roturas para que la retina no se desprenda como en enfermedades vasculares de la retina, retinopatía diabética, obstrucciones de vena, aneurismas, etc. Requiere de un examen ocular completo y la mayoría de veces angiografía fluorescencia.
La intervención se practica con anestesia tópica, es decir con gotas y se impacta directamente en las lesiones con un láser que nos guía donde va impactar el fotocoagulador. Antes de la intervención se debe evitar realizar la fotocoagulación con láser en zonas en las que no sea necesario. Esto podría producir quemaduras.
El principal riesgo es que la fotocoagulación sea inefectiva o insuficiente o que dañe estructuras importantes de la retina, como pueden ser vasos o la zona de la mácula. El láser quema, destruye, la zona de la retina isquémica para que deje de producir el factor proliferativo vascular. Ahora, los especialistas disponen de nuevas tecnologías que permiten hacerlo de forma mucho más llevadera, reduciendo las sesiones que se requerían anteriormente, una media de cinco, a una sola sesión de diez minutos, como explica en esta ponencia el Dr. García-Arumí de IMO.
Inyecciones intravítreas
Las inyecciones intravítreas se utilizan para administrar de forma local algún tipo de medicamento para el tratamiento de las complicaciones secundarias a la retinopatía diabética. Su principal indicación es el edema macular diabético (acúmulo de fluido en la mácula), en la que se usan o bien corticoides o bien antiangiogénicos a nivel intraocular.
Antes de realizar la inyección, se realiza una desinfección del ojo y de los párpados. Posteriormente a la inyección, se deben instilar gotas de antibiótico en el ojo intervenido durante unos días. La inyección en sí es un procedimiento corto. Se puede realizar en quirófano o en consulta pero siempre bajo unas condiciones mínimas de asepsia. Se realiza con anestesia tópica (gotas) y generalmente no produce molestias.
Como cada intervención, el mayor riesgo es la infección del ojo. De todas formas, si se realiza una correcta profilaxis, el riesgo es mínimo (mucho menor que tras una cirugía de cataratas, por ejemplo).
Estudios multicéntricos demuestran que lo mejor es la combinación de las inyecciones de fármacos intraoculares y láser.
Vitrectomía
La vitrectomía es una cirugía ocular que se utiliza para extraer el vítreo (un gel que rellena la cavidad ocular). Este procedimiento también se realiza, aun estando el vítreo en buenas condiciones, cuando se requiere extraerlo para trabajar directamente sobre la retina.
Esta cirugía ha permitido que muchos pacientes que hace algunos años perdían irremediablemente la visión, puedan mantenerla o recuperarla a niveles muy satisfactorios.
La vitrectomía se lleva a cabo cuando hay hemorragia vítrea, desprendimiento de retina o tracción sobre el área macular.
El especialista introduce en el ojo un sistema de luz, de infusión y de corte para seccionar la cápsula que rodea el humor vítreo para que la retina se relaje y vuelva a su sitio. Primero elimina el tejido proliferativo fibroso y al final aplica el láser en la parte periférica, igual que hace en la consulta. Finalmente, inyecta un fármaco antiangiogénico para reducir el sangrado postoperatorio. Es muy importante un tratamiento precoz para que mejore la visión con la cirugía. El tratamiento es muy eficaz si se realiza de forma precoz y con un buen control de la diabetes.
Fuente: www.canaldiabetes.com/
El café: parte de un estilo de vida saludable, activo y de una dieta equilibrada
El café es uno de los alimentos más internacionales que existen, ya que es consumido en todos los lugares del mundo todos los días del año.
Aunque existen alrededor de 800 especies dentro de la familia de las Rubiáceas, a la que pertenece la planta de café, apenas se cultivan unas 10. Así, el 95% de la producción mundial se realiza de las variedades Coffea arabica (Arábiga) y Coffea canephora (Robusta).
La denominación Robusta hace referencia a que esta especie requiere condiciones de cultivo (altitud, temperatura, etc.) menos exigentes que el café Arábiga. En este sentido, los cafés más preciados son los cultivados a gran altura, por la repercusión directa que esto tiene en su riqueza de sabores.
En relación con los hábitos de consumo de café, la media nacional se encuentra entre una taza y tres al día, y es que al 85% de los españoles les gusta este producto por su aroma y sabor.
La franja de edad en la que se registra un mayor consumo de café en España se encuentra entre los 46 y los 55 años. Sin embargo, el momento de inicio de consumo varía: una de cada tres personas comienza a tomar café en la universidad y el 29% lo toma ya desde niño.
Aunque en general los españoles asociamos una taza de café a momentos de tertulia, como la sobremesa o una charla entre amigos, el 84% de las personas lo toma en el desayuno, la mayoría con leche, aunque también tiene cabida en otros momentos del día, como la media mañana, en la que el 51% de los españoles elige indistintamente entre café solo, con leche o cortado.
Estar bien hidratado es fundamental, ya que influye de forma muy importante en nuestro rendimiento intelectual. En este sentido, las bebidas que contienen pequeñas cantidades de cafeína, como es el caso del café, pueden ayudar a concentrarse mejor durante las temporadas de estudio, según ha demostrado un estudio del Instituto Europeo de la Hidratación (EHI). Además, en contra de algunas creencias populares, un estudio publicado en la revista científica PLOS ONE demuestra que no existen evidencias de la relación entre el consumo moderado de café y la deshidratación.
El café también tiene un importante papel en el rendimiento físico. Así, en el caso de los deportistas, puede mejorar la velocidad y la potencia de esfuerzos cortos pero intensos, mejorando la resistencia a la fatiga.
Dado que es fuente de antioxidantes, sus beneficios en la prevención de enfermedades cardiovasculares son bien conocidos. De hecho, la Fundación Española del Corazón afirma que el consumo de café reduce el riesgo de muerte gracias a su citado efecto cardioprotector.
Su poder analgésico, aumentando la efectividad de los medicamentos que actúan contra el dolor de cabeza, o su efecto protector frente a enfermedades metabólicas, tal y como demuestran numerosos estudios internacionales, son también remarcables.
Por todo ello, el café forma parte de un estilo de vida saludable, activo y de una dieta equilibrada. De hecho, la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria incluyó el café en su Pirámide de la Hidratación Saludable, dentro de las bebidas de consumo diario, ya que, para ayudarnos a alcanzar los 2 – 3 litros de líquido que debemos consumir diariamente, es beneficioso incluir bebidas de diferentes sabores.
Fuente: Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC), 2008.
Diez mitos sobre la leche y la realidad que hay detrás
La leche es un alimento con unas cualidades nutritivas excelentes, un coste asequible y una gran diversidad de productos derivados. Pero, de un tiempo a esta parte, es habitual encontrar comentarios y consejos negativos relacionados con el consumo de la leche. En este reportaje, repasamos algunos de los mitos sobre la leche y cuál es la realidad que hay detrás.
1. El consumo de leche y lácteos sube el colesterol
Uno de los mitos más extendidos, pero la realidad, basada en la evidencia científica, dice lo contrario: el consumo de lácteos de forma regular y en las raciones recomendadas mejora la relación colesterol bueno- colesterol malo.
2. Más riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.
A pesar del contenido en ácidos grasos saturados de origen animal y colesterol de la leche y sus derivados, su consumo ha demostrado ejercer un efecto preventivo frente a la incidencia de enfermedades cardiovasculares. Este efecto puede estar derivado de varios de los componentes bioactivos de la leche, entre ellos el calcio.
Diversos estudios clínicos y meta análisis han demostrado que el consumo de lácteos incluso aquellos enteros está relacionado con mejor control de la tensión arterial y una disminución del riesgo de hipertensión.
3. La leche engorda.
No es cierto. El consumo de leche y lácteos en cantidades recomendadas contribuyen a regular el metabolismo de las grasas y el control de la saciedad, con lo que sirve para mantener al margen los problemas de peso y obesidad.
4. Causa diabetes y el síndrome metabólico
El síndrome metabólico, íntimamente asociado al desarrollo de diabetes tipo 2, se adquiere por unos malos hábitos dietéticos y de vida. Existen múltiples estudios epidemiológicos y meta análisis que apuntan a un efecto protector del consumo de leche y lácteos en la incidencia del síndrome metabólico. Además , la leche es uno de los alimentos con un índice glicémico más bajo.
5. La leche causa cáncer de colon y mama
Otra evidencia abrumadora: no solo no causa cáncer sino que tiene un efecto protector frente al riesgo de paceder cáncer colorrectal y de mama. Existen recientes estudios de meta análisis y estudios clínicos que arrojan disminución de riesgo en ambos tipos de cáncer asociado al consumo de lácteos.
6. La leche provoca mucosidad y asma
Para derribar este mito se hicieron una serie de estudios ciegos en los que se utilizaba leche y un placebo. La conclusión: No existe relación directa entre el consumo de leche y el aumento de mucosidad o de asma. Al contrario, en estudios recientes sobre asma se ha podido comprobar cierta protección asociada al consumo de lácteos.
7. La leche causa alergias
Como muchos otros alimentos, la leche contiene proteínas que pueden causar alergias a ciertas personas, pero su prevalencia es mucho menor de la que se cree: entre un 2 y un 6% en niños y tan solo del 0.1-0.5% en adultos. El problema radica en un autodiagnóstico muy elevado y la percepción del problema.
8. Calcio sin leche
Se cree que se puede alcanzar la cantidad diaria recomendada de calcio sin consumir leche o derivados. Pero la realidad es que no todos los alimentos se pueden considerar como fuente dietética de calcio ya que esto depende no solo de su contenido en calcio, sino de otros factores, como la biodisponibilidad o el tamaño habitual de la ración que se consume.
Por ejemplo, existen alimentos vegetales que contienen incluso mayor cantidad de calcio que la leche (algunas leguminosas, espinacas, frutos secos, condimentos) pero la cantidad de calcio que se pueden absorber a partir de ellos es inferior a la de la leche y por ello han de consumirse más raciones de esos alimentos para obtener la misma cantidad de calcio que con una única ración de leche.
9. La leche causa indigestión
La intolerancia a la lactosa es una patología que causa indigestión, y se debe a la incapacidad total o parcial de digerir la lactosa, el azúcar de la leche. Lo que hay que saber es que esta intolerancia no fuerza a la retirada de la leche o sus derivados de nuestra dieta pues hoy en día existen alternativas como las leches sin lactosa o los derivados lácteos fermentados en los que la cantidad de lactosa es sensiblemente más baja.
10. Solo los humanos consumimos leche después de la lactancia
Uno de los argumentos más usados por los detractores de la leche y que no tiene ningún principio sólido o razonable. La realidad es que, gracias a una mutación genética en un punto a lo largo de la evolución humana, no muy lejos en términos evolutivos, los humanos que dieron origen a las poblaciones europeas actuales adquirieron la capacidad de digerir la lactosa a los largo de la vida más allá de la lactancia materna. Tomamos leche porque podemos digerirla, igual que podemos reír, imaginar, innovar, crear, dibujar, componer música, usar el lenguaje escrito, o inventar mitos…