El 14 de marzo se celebra el Día Europeo para la Prevención del Riesgo Cardiovascular. Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte y discapacidad en los países desarrollados. Saber qué hacer para prevenir estas enfermedades es clave. Por eso, con ayuda de la Fundación Española del Corazón, hemos elaborado este decálogo de consejos cardiosaludables.
1. Cuida tu peso. Es importante mantener un peso adecuado, evitando el sobrepeso y, por supuesto, la obesidad. Mide tu Índice de Masa Corporal para saber si estás por encima de los niveles recomendados. Para hacerlo, divide tu peso en kilos entre tu altura en metros elevada al cuadrado. Si el resultado es mayor de 25 kg/m² se considera sobrepeso. Por encima de 30 kg/m² es obesidad.
2. Una alimentación cardiosaludable. Una dieta buena para el corazón ha de ser equilibrada y variada. Tiene que incluir frutas, verduras, hortalizas, pescado, aceite de oliva, carnes magras, cereales y lácteos desnatados. Y en el lado contrario: la sal, los azúcares y el alcohol: Tómalos sólo en pocas cantidades.
3. Prohibido fumar: El tabaco multiplica el riesgo de sufrir ataques cardiacos o cerebrales.
4. Media hora de ejercicio. 30 minutos de ejercicio diario son básicos para una buena salud cardiovascular. Es importante adaptarlos a las distintas condiciones físicas, y elegir así el tipo de ejercicio que más se adapta a cada uno: caminar, correr, practicar algún deporte de equipo, bailar… todo cuenta.
5. Fuera barriguitas. Es importante vigilar la grasa acumulada en el abdomen, ya que es peligrosa para el corazón. Mídete alrededor del ombligo: En la mujer, el perímetro abdominal debe estar por debajo de 88 centímetroa y en los hombres por debajo de 102 centímetros.
6. Colesterol y glucosa. Para llevar una buena salud cardiovascular hay que controlar los niveles de colesterol y glucosa. Con ejercicio y una dieta sana, seguro que las cifras son las correctas. Si no lo son, (por encima de 190 mg/dl de colesterol total y 110 mg/dl de glucosa), es recomendable visitar a un especialista.
7. Controla tu tensión. Las personas sanas han de tener la tensión por debajo de 140/90 mmHg. Los hipertensos también deben mantenerse por debajo de estas cifras. Para aquellas personas que ya han tenido problemas cardiovasculares, cerebrovasculares, renales o son diabéticos, la tensión ha de estar por debajo de 130/80 mmHg.
8. Al médico. Para evitar las enfermedades cardiovasculares es importante conocer cuál es tu estado de salud y adecuar a él tu estilo de vida. Acude al médico con un examen físico y tus antecedentes personales y familiares y pregúntale todas tus dudas. Actuar a tiempo es la clave para reducir los peligros.
9. No al estrés y la ansiedad. El aumento de tensión emocional es peligroso para el corazón. El estrés en casa y en el trabajo hace más difícil seguir un estilo de vida cardiosaludable.
10. Habla. Comparte tus dudas y problemas. Intercambiar experiencias te permite aprender y dar ejemplo para que otras personas se interesen por cuidar su corazón.