El papel de la escuela y la familia en la prevención
Como reflexiones previas a la hora de abordar el tema de la prevención me he planteado unas cuestiones que me conducen a unas impresiones un tanto pesimistas:
-Por un lado el conocimiento de casos cercanos de familias con hijas con trastornos alimentarios, que se trata de padres funcionales y preocupados en el cuidado de sus hijos. Me da cierta sensación de indefensión frente a estas situaciones.
-El hecho también de que se acepte que estamos abordando unos trastornos asociados a la cultura (sobre todo en los cuadros más purgativos y bulímicos) implicaría que son cuadros “de nuestro tiempo” y me lleva a la pregunta de si la cultura es modificable.
-Otra cuestión es que la anorexia nerviosa siempre ha existido a lo largo de la historia, entonces ¿podríamos prevenirla de forma eficaz?
-La población diana muy extensa (adolescencia y final de la infancia) pero también tenemos mucho campo sobre el que actuar.
-La etiopatogenia es desconocida, lo que puede suponer una limitación, aunque también conocemos con bastante fiabilidad algunos factores de riesgo sobre los que ponemos intervenir.
Preguntas sobre prevención
Me he planteado estas dudas:
-¿Es viable la prevención primaria o es preferible invertir en detección precoz?
-Psicoeducación clásica versus abordajes indirectos que no se centran en dar información sobre el trastorno.
-¿Qué es preferible campañas publicitarias (estilo DGT) muy impactantes o consejos generales de salud pública? Es difícil llegar a las familias. En el caso de las escuelas sí nos podemos dirigir a ellas.
Prevención primaria
La prevención primaria es todo lo que se debería hacer desde la administración y los profesionales implicados y las asociaciones para intentar frenar esta epidemia de trastornos.
Si nos centramos en qué podríamos saber sobre la prevención yo he consultado con mis pacientes adultas que llevan años de evolución de su trastorno y les he preguntado qué nos dirían sobre la prevención. Y éstas son algunas de las respuestas.
Desde la familia:
-Mantener hábitos familiares (comer juntos).
-Explicar los anuncios poco saludables.
-Fomentar la práctica del deporte. No caer en el sedentarismo.
-Que sean críticos con la televisión y reducirla al mínimo.
-Transmitir mensajes saludables de éxito con ejemplos cercanos (modelo delgada vs ejecutiva normopeso).
-Educar sin exigir (¿ es posible?).
-No usar la comida nunca en el ámbito familiar como castigo o recompensa.
Desde las escuelas:
-Educar sobre imagen y aceptación de las diferencias, sobre la tolerancia al fracaso.
– Las pacientes se quejaban del acceso a información demasiado fácil.
-Educación emocional en los colegios (impartir talleres a los maestros).
-Dietas más sanas en los colegios.
Evidencias de los programas de prevención
Hay algunas evidencias que apuntan a su eficacia. Un 50 por ciento reducen los factores de riesgo y un 29 por ciento reducen la futura patología alimentaria.
En un metanálisis del año 2009 aparecen dos programas que pueden llegar a reducir el riesgo de TCA y de obesidad. Y también parece que fracasan los programas puramente informativos/educativos.
Factores de éxito de los programas de prevención
Que sean selectivos (ir a los sujetos de riesgo), no hacerlos universales. En segundo lugar, no empezar con edades muy tempranas (a partir de 14-15 años); que los contenidos sean interactivos con participación activa de los chicos y chicas y que estén focalizados en la aceptación corporal. El tema de la insatisfacción corporal parece clave. También parece que es preferible que los programas sean llevados a cabo por profesionales entrenados no por los profesores o monitores de comedor (esto es difícil de poner en práctica actualmente).
Programas de prevención
Entre los programas con resultados interesantes podemos destacar:
-Body project: basado en una intervención de la psicología social con elementos cognitivos, básicamente en la disonancia frente a la internalización del modelo del patrón delgado de éxito, con pocas sesiones y preventivo de la aparición de obesidad y TCA.
-Sorority body image program (que es una adaptación del anterior) de sólo dos sesiones que presenta muy buenos resultados.
-Peso saludable. Se intenta recomendar llegar a un peso normal a través de cambios lentos y graduales. Se usan entrevistas motivacionales con los alumnos y también compromisos públicos de cambio.
-Otros: Girl talk, Student bodies o Weight to eat.
Programas de prevención desde la escuela
-La escuela debe fomentar la educación para la salud.
-La incidencia es transversal.
-Difícil equilibrio entre exigencia/respeto a cualidades individuales.
-Importante el papel de los monitores de comedor y de los tutores en la detección precoz.
-Combatir activamente el menosprecio o discriminación entre alumnos (bulling). Aunque es muy difícil de realizar.
-Supervisión por dietistas de la alimentación en el comedor escolar.
-Hacer conscientes los mensajes culturales implícitos con discusión crítica de los mismos.
-La colaboración escuela/sistema sanitario.
-Constancia de los programas, adecuados a los grupos de edad, con el uso de películas, series, estudio crítico de anuncios, etc.
Situaciones escolares de riesgo elevado para TCA
-Acoso escolar (bulling).
-Cambios de instituto o centro de enseñanza.
-Situaciones de aislamiento o rechazo.
-Detección de TCA en el aula (“contagio social”) si hay alguna compañera de clase.
Familia y prevención
Hay factores relacionados con los problemas alimentarios: cambios demográficos con reducción familia nuclear y la “desaparición” de familia la extensa; alargamiento horarios laborales; incorporación de la mujer al mundo laboral.
Y la pregunta sería ¿cómo hacer llegar los mensajes o programas de prevención? ¿A través de TV e internet?
No hay un único modelo de familia asociada a los trastornos alimentarios, sino que es un grupo heterogéneo de familias, con una serie de factores de riesgo y de dificultades familiares que habría que intentar afrontar.
Recomendaciones familiares
-Evitar normas rígidas en alimentación.
-Fomentar comidas familiares.
-Evitar la crítica.
-No evitar el contacto físico.
-Aclarar y negociar normas de casa.
-Ser paciente y predicar con el ejemplo.
Situaciones familiares de riesgo elevado para TCA
-Separación conyugal o divorcio.
-Sobrepeso u obesidad (especialmente maternas).
-Enfermedades familiares graves.
-Viajes de adolescentes al extranjero.
El dilema de las dietas en la familia
-Las familias deberían de huir de incorporar la dieta como un estilo de vida.
-Cambios en los hábitos alimentarios (¿detrás de una chica que no sabe o no quiere comer hay una madre y/o un padre que no sabe o no le gusta cocinar?).
Factores de riesgo para TCA e inmigración
-Proceso migratorio inconcluso con malas condiciones.
-“Choque” cultural: si no hay integración con las tradiciones del país de acogida.
-Migración parental inicial: cuando los padres se marchan primero y dejan a los hijos en el país de origen.
-Pérdida del soporte de la familia de origen.
-Si ya existía preocupación por la imagen en el país de origen.
-Sobreocupación paterna en país de acogida para tener unos ingresos mínimos.
Factores de protección para TCA en la emigración
-Conservación de la cultura de grupo y familia extensa (ej etnia gitana).
-La defensa de valores propios (ej minoría negra en USA).
-Densidad étnica elevada, cuando los emigrantes se agrupan en zonas.
-Reajuste de funciones parentales (más presencia y acompañamiento de jóvenes).
-Acomodación paulatina a tradiciones de sociedad de acogida sin ruptura de las propias.
Conclusiones
-Aunque la cultura cambia necesariamente a lo largo del tiempo, el impacto físico y psicológico de las influencias culturales puede ser atenuado por un esfuerzo que las desvele y haga conscientes a los sujetos.
-Familia y escuela son claves en esta lucha, aunque la administración debiera tener un papel más proactivo (¿similar a lo ocurrido con la ley antitabaco?).
-Y por último dejo una pregunta en el aire ¿se puede prevenir conjuntamente TCA y obesidad?