La división de diabetes de Abbott, Abbott Diabetes Care, ha lanzado, en colaboración con la Agencia de Evaluación de Tecnologías Sanitarias (AETS), el Instituto de Salud Carlos III y de la Asociación Nacional de Directivos de Enfermería (ANDE), el primer documento que aporta soluciones y casos de éxito en el manejo de la patología. El objetivo es mejorar la gestión de la diabetes en España y contribuir a la sostenibilidad del sistema sanitario.
El documento, presentado en el III Foro Gerendia, nace del consenso entre enfermeros, médicos, farmacéuticos y personal sanitario administrativo que participaron en las distintas ediciones del Foro Gerendia, un encuentro organizado por Abbott que les ha permitido compartir experiencias y colaborar entre sí para mejorar la atención de las personas con diabetes.
Según Antonio Sarría Santamera, director de la Agencia de Tecnologías Sanitarias del Instituto de Salud Carlos III, “a través de un modelo de colaboración entre todos los agentes implicados en la gestión de esta enfermedad, se han definido las líneas de actuación imprescindibles para mejorar su abordaje. La diabetes constituye un reto en gestión para todos los sistemas sanitarios”.
El documento Gerendia
Después de varias jornadas de trabajo, los expertos identificaron varias líneas de acción como imprescindibles para mejorar la gestión de la diabetes, todas ellas incluidas en el Documento Gerendia:
– Formar un paciente experto potenciando su auto-responsabilidad ya que está demostrado que, cuando las personas participan activamente en la toma de decisiones sobre el manejo de su enfermedad los resultados que se obtienen son mejores.
– Consolidar a enfermería como la puerta de entrada de los pacientes y asumir la gestión de los casos. El personal de enfermería debe gestionar la adecuada transición del paciente interniveles, informándole sobre cómo mejorar su interacción con el sistema sanitario, la búsqueda de un óptimo tratamiento de la enfermedad con especial atención a la adherencia.
– Establecer Atención Primaria como líder del proceso en la diabetes. Un elemento clave para la coordinación y continuidad asistencial es institucionalizar y formalizar la comunicación entre atención primaria y atención especializada, ya que actualmente los pacientes perciben que la atención es fragmentada y episódica, lo que conlleva una menor responsabilidad del paciente con su enfermedad.
– Individualizar la asistencia, acompañando al paciente en su proceso, teniendo en cuenta su entorno, creencias y valores. La persona y su entorno, su salud y necesidades deben pasar a ser el foco central del sistema.
– La comunicación efectiva se plantea como una herramienta fundamental para favorecer la adherencia y mejorar la calidad asistencial. La capacidad de comunicar información relacionada con la salud y motivar el deseo y la posibilidad de participar en la toma de decisiones por parte de los pacientes deben considerarse herramientas clínicas básicas para conseguir sistemas sanitarios más efectivos y eficientes.
Pasando a la acción
Una de las características diferenciales que presenta este documento es que recoge 14 casos prácticos que actualmente se llevan a cabo en diferentes centros asistenciales y áreas de salud de nuestro país. Según los expertos que han participado en su elaboración, la mejora de la gestión de la diabetes pasa por adaptar localmente aquellas experiencias que hayan obtenido buenos resultados en el manejo de los pacientes con diabetes.
Algunos ejemplos incluidos en el Documento Gerendia son: la creación de un protocolo unificado de atención al paciente crónico en Alicante, el desarrollo de programas estructurados de educación terapéutica del paciente y su entorno, que en Oviedo ha conseguido una reducción de los ingresos y los días de estancias, la implementación de métodos de evaluación objetivos de equipos de atención primaria llevados a cabo en Toledo, el modelo de continuidad asistencial en Madrid y la comunicación interniveles en Barcelona, Tenerife y Valencia.