El 30% de la población infantil padece sobrepeso u obesidad

El exceso de peso entre la población infantil sigue siendo una problemática de primer orden y afecta a un 28,3% del alumnado evaluado en los municipios participantes en el Programa Thao durante el curso académico 2011-2012. Así lo demuestran los datos presentados por la Fundación Thao que analizan una muestra de 20.588 niños y niñas de entre 3 y 12 años. Según Rafael Casas, director científico de la Fundación Thao, “la situación actual nos hace ver que la suma de esfuerzos es muy importante y que tenemos que seguir trabajando para conseguir nuestro objetivo. Nos estamos dando cuenta, con los datos en la mano, que las prevalencias de obesidad son muy altas y que queda mucho trabajo por hacer”.

Los datos del estudio transversal realizado durante el curso 2011-2012 siguen mostrando una situación alarmante en cuanto a la obesidad y el sobrepeso en las edades más tempranas. Más de uno de cada cinco niños y niñas de entre 3 y 5 años sufre exceso de peso, lo que se concreta en una prevalencia de la obesidad del 5,7% y del sobrepeso del 16,2%. Además, si analizamos los datos en conjunto, con niños y niñas de 3 a 12 años, los porcentajes se elevan hasta el 21,2% en sobrepeso y hasta 7,1% en obesidad.

En palabras del presidente de la Fundación Thao, Henri García: “Nos preocupa enormemente la elevada prevalencia entre los niños de menor edad. Para poder generar un cambio real en esta gran problemática, necesitamos una estrategia efectiva dirigida no sólo al fomento de la alimentación saludable y la actividad física, sino también actuando sobre factores psicológicos y sociales. Todos estos elementos son indispensables para resolver lo que ya se ha convertido en uno de los mayores retos para la salud pública de nuestro tiempo”.

Es por esto que la Fundación Thao ha creado un modelo innovador de intervención. Se trata de los Talleres Thao-Pequeña Infancia dirigidos a los padres/madres de niños de 0-3 años y a profesionales de la pequeña infancia. Estos talleres están pensados para abordar la neofobia alimentaria, los procesos innatos de autorregulación energética y el vínculo afectivo. De forma complementaria, la Fundación Thao ha estado trabajando en la franja de 0-3 años mediante las temporadas temáticas con diversos materiales educativos.

El actual contexto de crisis puede deteriorar los hábitos saludables entre los colectivos más desfavorecidos y hacer más difícil el seguimiento de una dieta variada y equilibrada. En vistas de esta realidad social, la Fundación Thao ha decidido trabajar en red con entidades con la cuales crear sinergias y colaboraciones para llegar a todas aquellas familias que requieran su apoyo. Una de las alianzas más recientes es su colaboración con Cruz Roja de Cataluña, con la cual está trabajando en proyectos dirigidos especialmente a estos sectores en mayor riesgo de vulnerabilidad y exclusión social, y teniendo un especial cuidado hacia el colectivo de la infancia, ampliando así las acciones del programa Thao que van dirigidas a toda la población.

El Programa Thao contribuye a mantener la obesidad a raya

Si bien el estudio transversal permite hacer una fotografía fija de la situación en cuanto al exceso de peso de los niños españoles cada año, la Fundación Thao también ha elaborado un estudio longitudinal con un colectivo de 6.697 niños y niñas de 10 municipios españoles que implementan el Programa Thao (Aranjuez, San Juan de Aznalfarache, Villanueva de la Cañada, Sant Carles de la Ràpita, Castelldefels, Alcázar de San Juan, Balaguer, Montgat, Monzón y Utrillas). Esta es la muestra más relevante en España hecha en un estudio de este tipo.

Este estudio longitudinal refleja que, después de cuatro años en los cuales se ha hecho un seguimiento de los mismos niños y niñas que participan en el Programa Thao, el incremento en sobrepeso y obesidad ha sido de tan solo algunas décimas porcentuales. La obesidad ha aumentado 0,1%, el sobrepeso un 0,9%, y el total de exceso de peso (sobrepeso+obesidad) tan solo un 1% de manera que podemos considerado que se ha frenado la tendencia al alza.

Según los últimos datos de la OMS, la prevalencia de la obesidad en el mundo se ha doblado en los últimos 30 años y se estima que el crecimiento siga siendo progresivo en el porcentaje de afectados por el exceso de peso. Aunque no se puede afirmar que el estancamiento mostrado por el estudio de la Fundación Thao se pueda atribuir directamente a la implementación del Programa Thao -ya que no hay datos comparativos con municipios de control que no estén implementando el Programa-, se trabaja sobre la hipótesis que el Programa actúa como freno de la tendencia al alza.

Según Rafael Casas, director científico de la Fundación Thao, “consideramos positivo el hecho que en los municipios analizados se haya notado un estancamiento en los datos de prevalencia, ya que este era el objetivo que nos marca la Organización Mundial de la Salud: frenar la progresión de esta epidemia”.

Desde la Fundación no tienen ninguna duda de la incidencia del Programa Thao en la estabilización de los datos de exceso de peso infantil aunque, como afirma el responsable del área de evaluación e investigación de la Fundación Thao, Santi Gómez, “todavía no disponemos de un estudio que nos permita cuantificar nuestro grado de influencia en este cambio de tendencia. Para solucionarlo, y gracias a una Beca FIS del Ministerio de Economía y Competitividad y al IMIM-Instituto del Hospital del Mar de Investigaciones Médicas, estamos realizando un nuevo estudio de tres años de duración que nos permitirá comparar las diferencias en la evolución del exceso de peso infantil, y otras variables entre dos municipios (Terrassa y Sant Boi de Llobregat) donde Thao implementa su Programa y dos municipios de control (Molins de Rei y Gavà)”.

Este nuevo estudio permitirá tener, a partir del año que viene, datos científicos que medirán el impacto del Programa Thao. Para conseguirlo, la Fundación Thao ha creado una nueva herramienta online de evaluación que facilita el proceso de registro y recogida de datos de los cuestionarios sobre hábitos de alimentación y sedentarismo, así como otras variables psicológicas y sociales.

Gómez asegura que “mediante la nueva herramienta online facilitamos enormemente la tarea de recogida y procesamiento de datos. Además, la incorporación de nuevas variables y preguntas nos permitirá conocer con mucho más detalle las pautas y el nivel de actividad física de los niños y la cantidad de su dieta, pero también podremos profundizar más sobre su vínculo psicológico con la comida o el nivel socioeconómico de su familia. Sin olvidar que en un futuro esta herramienta online podrá ser utilizada por la comunidad científica”.

Por primera vez, también se incluyen cuestionarios para los padres y madres con preguntas que permiten valorar la cualidad de la dieta de las familias o el nivel de actividad física, así como el nivel socioeconómico.

Doctor talking with her patient

Detección precoz de la osteoporosis en población de riesgo

El tejido óseo es un tejido vivo. El recambio óseo se produce constantemente. El remodelado, que es la base de la formación, está realizado por los osteoclastos y la formación está mediada por los osteoblastos. Hasta los 30 años hay un aumento de la masa ósea pero llega un momento que se estabiliza y a partir de los 50-55 años empieza el declive por la pérdida estrogénica.

La manifestación clínica fundamental es la fractura, de manera que debemos estar encaminados hacia la detección precoz de la enfermedad.

La osteoporosis puede ser idiopática o primaria (representa más del 95%) como la que ocurre en las mujeres postmenopáusicas; la que se produce a partir de los 70 años, osteoporosis senil; la del embarazo y juvenil; y la osteoporosis del varón.

Por otro lado puede ser secundaria a enfermedades endocrinas, gastrointestinales, síndromes de malabsorción asociadas al uso de medicamentos, a los mielomas y otros procesos tumorales, enfermedades inflamatorias sistemáticas, insuficiencia renal crónica, diabetes, hipertensión, inmovilización, alcoholismo crónico o enfermedades que requieran el uso de corticoides como EPOC.

Los médicos de atención primaria se centran principalmente en la osteoporosis postmenopáusica y senil.

Osteoporosis postmenopáusica

La osteoporosis postmenopáusica representa el 30%. El cambio hormonal está asociado con una deficiencia estrogénica y tiene una rápida instauración alrededor de los cinco primeros años después del inicio de la menopausia, con una pérdida del 15-20% de la masa ósea en ese periodo. Sobre todo afecta al hueso trabecular, fundamentalmente vértebras o muñeca.

Osteoporosis senil

Aparece en mayores de 70 años, afecta a ambos géneros, hay un cambio hormonal referido a la aparición de un hiperparatiroidismo secundario y afecta fundamentalmente al hueso de cadera.

Diagnóstico

Hay factores de riesgo de osteoporosis y factores de riesgo que predisponen a las fracturas a través de otro mecanismo intermedio, que puede ser la caída.

La manifestación clínica puede ser la aparición de dolor, de fractura o la deformidad, especialmente en las fracturas vertebrales.

Se pueden realizar unos análisis básicos de metabolismo óseo (marcadores de remodelado), pruebas radiológicas, densitometría y ecografía.

Se debe realizar una historia clínica detallada en base a una anamnesis, donde se busquen antecedentes familiares de la paciente, si ha habido fracturas por fragilidad, si hay antecedentes personales de fracturas precoces en mayores de 50 años, si hay tratamientos farmacológicos, si los pacientes presentan comorbilidades o si refieren un historial de tendencia con frecuencia a las caídas.

En la exploración física hay que pesar y medir. Se ha hablado de un IMC bajo. Y hay que medir la talla para ver si ha habido diminución de la altura, valorar la presencia de cifosis, el equilibrio muscular y la agilidad. Otros factores a tener en cuenta son la audición y la visión. Y aquellos médicos que realicen domicilios pueden también valorar las condiciones de la vivienda.

Factores de riesgo

Los factores de riesgo son aquellos estados que confieren un riesgo incrementado para el desarrollo de una enfermedad, que siempre tienen que estar presentes antes de que se desarrolle la enfermedad, que nos dan información sobre las causas y mecanismos que conducen al desarrollo de la enfermedad y son importantes para la toma de decisiones a la hora de establecer el tratamiento.

Hay factores sobre los que difícilmente vamos a poder actuar como los fisiopatológicos: edad, raza, déficit estrogénico (cuando aparece la menopausia), peso corporal o las enfermedades que se padecen.

Sin embargo hay otros factores ambientales como los hábitos saludables sobre los que sí podemos actuar como recomendar hábitos nutricionales correctos, evitar los excesos de cafeína, alcohol y tabaco, y tener en cuenta fármacos como la heparina, anticoagulantes, hormonas tiroideas, corticoides… En definitiva recomendar los estilos de vida que sean más protectores para desarrollar unos huesos sanos.

Osteoporosis y fármacos

Los fármacos asociados a osteoporosis son los inhibidores de la aromatasa (para el cáncer de mama), inhibidores de la gonadotropina para el cáncer de próstata, tratamiento antiepiléptico, glitazonas, ciclosporina, inhibidores de las bombas de protones, tiroxina, heparina o diuréticos del asa.

Factores de riesgo de caídas

Son la edad, historia de fracturas y caídas previas, inmovilidad, debilidad muscular, tabaquismo, enfermedades crónicas, alteraciones del equilibrio o de la visión, o los tratamientos predisponentes (por ejemplo diuréticos que hacen que por la noche se levanten al baño con urgencia).

Escalas de riesgo

El médico de primaria dispone, para establecer el diagnóstico en la consulta, de las escalas de riesgo y las pruebas complementarias.

El objetivo de las escalas no es diagnosticar la osteoporosis, sino que son una ayuda para la toma de decisiones y su aplicación en la práctica diaria sirve para la preselección de pacientes (es importante en estos momentos de crisis para ser costoeficientes).

Hay escalas de baja masa ósea y de riesgo de fractura como el FRAX. Las ventajas de éste es que es fácil de utilizar e interpretar. Nos habla del riesgo de fractura a diez años. También tiene algunos inconvenientes como que no puede utilizarse en mujeres premenopáusicas ni en hombres menos de 50 años, que sólo es aplicable en mujeres que no han recibido tratamiento y que muchos de los factores que se han comentado no están incluidos en el FRAX (factores de riesgo de caídas o de remodelado).

Pruebas complementarias

Una de las pruebas complementarias a disposición del médico de atención primaria es la radiología, que es fácil, barata, accesible y cercana.

Si los médicos de atención primaria recibimos un informe del radiólogo de osteopenia radiológica (que no es un diagnóstico de osteoporosis) nos debe hacer pensar que tenemos que ahondar en los factores de riesgo y aunque quizás hemos pedido una placa por otro motivo (por ejemplo una de tórax para hacer seguimiento de una neumonía) debemos de estudiar más a ese paciente. La importancia del diagnóstico de osteoporosis es que predice el riesgo de fractura.

Análisis de laboratorio

Los análisis de laboratorios sólo tienen validez para detectar secundarismos, para identificar las enfermedades que puedan ser causantes de osteoporosis.

Se puede realizar algo tan sencillo como medir la calciuria en orina de 24 horas para ver si hay pérdidas de calcio (por ejemplo por el seguimiento de dietas hiperproteicas). También se puede determinar la testosterona en el varón, TSH, hormonas en los periodos premenopáusicos, etc.

Población diana

Se debe hacer detección precoz en mujeres postmenopáusicas, con factores de riesgo potentes, mujeres que ya han sufrido una fractura previa por fragilidad, mujeres con enfermedades sistémicas (que producen osteoporosis secundarias) que dificultan la absorción de calcio y vitamina D, personas con bajas ingestas de calcio, pacientes con tratamientos farmacológicos que predisponen a la pérdida de masa ósea o a las caídas y, por último, las personas que tienen un aumento de tendencia a las caídas.

noticia_generica

Desarrollan un método para regular la liberación de insulina en pacientes con diabetes tipo 1

Investigadores del Instituto de Automática e Informática Industrial de la Universitat Politècnica de València (UPV) y del Instituto de Informática y Aplicaciones de la Universitat de Girona (UdG) han desarrollado un nuevo método para la monitorización continua de glucosa en pacientes con diabetes mellitus tipo 1, según han informado en un comunicado.

Se basa en un nuevo algoritmo de calibración que, adaptado a los actuales dispositivos utilizados en los tratamientos con pacientes diabéticos, permite aumentar la exactitud en la estimación de glucosa en sangre y ayuda a regular de manera controlada y automática la liberación de insulina. Los resultados del sistema, patentado por la UPV y la UdG, han sido publicado recientemente en la revista Biomedical and Health Informatics.

“Nuestro método supone un paso más en el desarrollo del “páncreas artificial” para la automatización del control glucémico, ayudando así a mejorar la calidad de vida de los pacientes con diabetes mellitus tipo 1″, ha destacado el investigador del Instituto ai2 de la Universitat Politècnica de València.

Desde que en 1993 el estudio Diabetes Control and Complications Trial demostrara la relación entre la hiperglucemia y el riesgo de complicaciones crónicas microvasculares en diabetes mellitus 1 (como la retinopatía, nefropatía y neuropatía), así como el beneficio del buen control glucémico (medido mediante los niveles de hemoglobina glicada A1c), la normoglucemia se ha convertido en el objetivo de control en pacientes con este tipo de patología.

Actualmente, según ha explicado Jorge Bondia, el paciente es sometido a una terapia intensiva de insulina, bien mediante inyecciones diarias múltiples o con la infusión continua mediante bombas de insulina. Sin embargo, la terapia intensiva de insulina tiene como contrapartida el incremento de episodios de hipoglucemia, que puede tener consecuencias graves como por ejemplo el coma diabético. Así, la monitorización de la glucemia constituye un elemento fundamental en el tratamiento y control de los pacientes diabéticos.

Este tipo de seguimiento se basa en la medición de la concentración de glucosa en el fluido intersticial, es decir, en un compartimento diferente al que tradicionalmente se usa como referencia, que es el plasma.

Los algoritmos actuales se basan en técnicas de regresión lineal, en los que la información de la dinámica entre los distintos compartimentos biológicos es ignorada, lo que puede provocar errores de estimación elevados. “Es precisamente la magnitud del error la que provocó que la monitorización continua de glucosa se considere hoy como una herramienta complementaria y no sustitutiva a la medición capilar”, ha añadido Jorge Bondia.

Menos errores de estimación

El método desarrollado desde los laboratorios de la UPV y la UdG reduciría esos errores de estimación. Consta de un algoritmo basado en un conjunto de estimadores entrenados mediante datos de la población representativa de los pacientes a monitorizar que proporcionan una estimación de glucosa en plasma. “Nuestro objetivo con este proyecto es contribuir a que, en un futuro, la monitorización continua de glucosa deje de ser complementaria a la medición capilar”, destaca Jorge Bondia.

Los investigadores del Instituto ai2 de la UPV y del Instituto de Informática y Aplicaciones de la UdG han validado esta nueva tecnología en diversos estudios clínicos, desarrollados con un total de 42 personas, ocho sanas y 34 pacientes diabéticos tipo 1. Estos estudios concluyeron a finales del año pasado.

reportaje_generica

Uno de cada cuatro alérgicos a alimentos, descontento con el etiquetado de los productos

Esta encuesta de Eroski, para la que se ha entrevistado en las últimas semanas a más de 1.100 personas de 17 comunidades autónomas que sufrían una o ambas dolencias o que tenían a su cargo a familiares que las padecían, revela que uno de cada cinco siente que habitualmente no puede hacer la compra con total seguridad en cualquier establecimiento y un 37% sólo a veces. Es más, uno de cada cuatro piensa que los productos nunca se etiquetan de manera adecuada.

Además, el 90% de los encuestados alerta de que el carro de la compra de un alérgico e intolerante alimentario es más caro que el de una persona sin estas enfermedades. Concretamente, piensan que es un 46% más caro que para el resto de la población.

Comer fuera de casa representan un riesgo

Y, en esta misma línea, para tres de cada cinco encuestados salir a comer fuera supone un riesgo para su salud. Más de la mitad de los encuestados opina que en hostelería nunca se toman las precauciones necesarias: avisar sobre la posible presencia de alérgenos en los platos, detallar al máximo los ingredientes en sus cartas y menús, evitar la contaminación cruzada en el almacenamiento y manipulación de los productos, y disponer de útiles de trabajo exclusivos para los menús infantiles. De ahí que exijan más formación en el ámbito de la hostelería en materia de alergias e intolerancias alimentarias.

Ante esta situación, dos de cada tres entrevistados aseguran que su dolencia les condiciona a la hora de comer fuera de casa. Incluso tres de cada cinco creen que hacerlo supone un riesgo para su salud, en especial a los menores de 10 años (según declaran los tutores del 94% de ellos). En este sentido, hay diferencias entre los alérgicos e intolerantes: un 69% de los primeros siente que está en riesgo, mientras que entre los intolerantes la proporción baja un poco y es del 54%.

Tanto alérgicos como intolerantes de todas las edades temen que no se excluya el ingrediente dañino del plato pese a requerirlo y que se produzca una contaminación cruzada en el momento de elaborar el plato.

Sin embargo, los alérgicos también añaden otro temor (especialmente los menores de 10 años y con edades comprendidas entre los 10 y los 19 años): que la ayuda médica no llegue a tiempo o que nadie a su alrededor sepa actuar en caso de tener una reacción.

Por ello, las personas entrevistadas suelen tomar sus propias precauciones. En primer lugar, evitando cierto tipo de establecimientos: de comida rápida (un 47% lo hace), de cocina asiática, italiana y mexicana (un 40% respectivamente) y de buffet (un 30%).

Además, si finalmente se toma la decisión de salir fuera, hay quien no renuncia a seguir un procedimiento. En primer lugar, un 34% siempre reserva con anterioridad y durante la misma un 52% tiene por costumbre explicar su enfermedad al personal del establecimiento (más común entre los alérgicos que entre los intolerantes y entre los jóvenes de entre 10 y 19 años).

Una vez en el restaurante, el 91% de los entrevistados lee cuidadosamente las descripciones de los platos por si hay alguna mención sobre el alimento dañino y el 79% verifica con el camarero los ingredientes que contiene cada uno de ellos. Por último, cuando piden la comida, poco más de la mitad de los encuestados se asegura de que el camarero le da el mensaje al cocinero.

video_generica_listado

Mil maneras de morir… si eres una bacteria

Recogemos la conferencia del Dr. Juan Anguita en el marco del Ciclo de Conferencias científico divulgativas Ciencia para el desarrollo cultural, organizado por Instituto Tomás Pascual Sanz y la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales.

Acceda a la transcripción de la ponencia

video_generica_listado

De genes, genomas y epigenomas

Recogemos la conferencia del Dr. Luis Franco Vera, en el marco del Ciclo de Conferencias científico divulgativas Ciencia para todos organizadas por la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales y el Instituto Tomás Pascual Sanz.

Acceda a la transcripción de la ponencia

reportaje_generica

Nutrición y osteoporosis

La osteoporosis es una enfermedad caracterizada por una resistencia ósea disminuida, una mezcla de factores, masa ósea y calidad de hueso. La resistencia ósea disminuida favorece la fractura, que es la punta del iceberg de la enfermedad.

Factores de riesgo

Se pueden clasificar como no modificables: la historia familiar (en el proceso genético hay varios polimorfismos involucrados), hay muchas osteoporóticas que tienen antecedentes familiares; las fracturas previas (indican predisposición a padecer la enfermedad); raza blanca; edad avanzada; sexo femenino; y otros factores como la demencia y la mala salud.

Y dentro de los factores modificables: el hábito de fumar, bajo peso de la mujer, déficit estrogénico, baja ingesta de calcio, exceso de alcohol, actividad física inadecuada, alteraciones de la visión que facilitan las caídas, caídas frecuentes y la mala salud. Sobre éstos recae el esfuerzo en prevención, al corregir los factores de riesgo para evitar la baja resistencia ósea que favorece la fractura.

La masa ósea evoluciona en el tiempo. Se adquiere el pico de masa ósea alrededor de los 20-30 años, siempre mayor en el hombre que en la mujer, por ello tiene más tendencia la mujer a padecer la enfermedad. Hay factores genéticos y ambientales que regulan el pico de masa ósea, como la nutrición, el ejercicio, el tabaco, los fármacos… Se consigue un estado basal y a partir de una edad comienza el declinar (en la mujer muy importante tras la menopausia).

La ingesta adecuada de calcio y de vitamina D, y el ejercicio son factores que van a regular (junto la genética) el adecuado nivel de pico de masa ósea para que después con el tiempo la pérdida de masa ósea no llegue a la zona de fracturas. Las personas que tienen una ingesta adecuada de calcio van a tener un pico de masa ósea mayor y por tanto van a tener un reservorio, respecto a los que tienen una inadecuada ingesta de calcio.

Para unos huesos fuertes

Se necesita:

-La ingesta adecuada de calcio se considera 1500 mg/d en adolescentes y 1000mg/d en los adultos, 4 raciones de lácteos fundamentalmente.

-Vitamina D.

-Ejercicio físico.

-Abstención del tabaco, y del exceso de alcohol y café.

-Evitar exceso de proteínas y sodio.

-Fitoestrógenos.

Papel de la nutrición en la prevención

La alimentación debe ser variada, distribuida con ciertos nutrientes en cantidad suficiente, fundamentalmente el calcio y la vitamina D.

El National Dairy Council dice que se pueden encontrar 300 mg de calcio (una ración) en los siguientes alimentos: un vaso de leche, 2 yogures, 30 gr de queso manchego o 7 sardinas con espinas. Los alimentos más ricos en calcio son los lácteos: leche, yogur y queso. Y esto es lo que recomendamos a nuestros pacientes para la prevención en general, el consumo diario de productos lácteos.

La resistencia ósea está relacionada con la densidad mineral ósea (DMO) y con el contenido de calcio. El cuerpo contiene 1-1,5 kg de calcio en el hueso, y va subiendo con la edad pero a partir de un umbral el exceso se elimina por la orina o heces.

Tasas de fracturas

El estudio de Matkovik en el año 79 observó que, en función de las regiones de su país (Yugoslavia), si la zona tenía un alto consumo de calcio la tasa de fractura de cadera era de 15 por 100.000 pero si el consumo era bajo era de 54 por 100.000.

En un estudio intervencionista de Holbrook publicado en Lancet tras 14 años de seguimiento en las personas que tenían fractura de cadera se observó una menor ingesta habitual de calcio al comienzo del estudio. Y en el estudio de Cooper en 1988 se vio que un aumento de fractura de cadera de seis veces cuando tenían una ingesta inferior al adecuado.

Hoy día sabemos que gracias a la supresión de la PTH el calcio mejora la masa ósea y tiene un efecto positivo. Esto contribuye a mejorar la resistencia y a disminuir la tasa de fracturas (ojo con los suplementos naturales de calcio porque pueden contener otros elementos como plomo o aluminio).

Embarazo y lactancia

Son dos periodos importantes para la mujer. Sabemos que el feto nace con una cantidad de calcio y que durante la lactancia se pierden 250 mg /d. El efecto deletéreo en parte está detenido porque hay muchos estrógenos en la mujer, ganan más peso, mayor absorción de calcio, y la lactancia favorece la remodelación de hueso. El problema puede ser un embarazo en la adolescencia.

Menopausia

A partir de una edad el hueso empieza a perder masa y hay que hacer énfasis en los factores de corrección, fundamentalmente de calcio.

Un estudio de Rico publicado en Calcif Tissue Inc. en mujeres premenopáusicas con masa ósea baja vio que había correlación entre la ganancia de DMO y la cantidad de calcio ingerido, indicando que en esa fase ya se podía intervenir de manera activa con la aportación de calcio.

Sin embargo a pesar de las evidencias, la ingesta de calcio es inferior a las recomendaciones. El estudio NHANES mostró que la media en varones era de 925 mg/d (recomendaciones entre 1000-1200 mg/d) y en mujeres mucho más baja: 657 mg/d.

En nuestro país hicimos un estudio telefónico en el que concluimos que la ingesta de calcio no era adecuada, fundamentalmente en personas mayores de 50 años, donde había una ingesta muy por debajo de lo recomendado.

Fósforo

Se recomienda una relación calcio/fósforo igual o superior a 1. Carne, aves y pescados tienen fósforo en proporción superior al calcio y esto por varios motivos puede producir una disminución del efecto positivo del calcio. También las bebidas carbonatadas y los alimentos procesados pueden producir mucho fósforo y efecto negativo en la absorción de calcio.

La ingesta excesiva cuando se da por bebidas de cola eleva la PTH y disminuye el consumo de calcio porque quela el calcio en el intestino, aumenta la resorción de hueso. Las dietas hiperproteicas (la dieta de los esquimales), las sales de fosfato como aditivo acidulante de algunas bebidas, la bebida de cola -que además tiene carga ácida- van a producir una alteración secundaria en la masa ósea y más tasa de fractura. Y por lo tanto hay que recomendar que la ingesta proteica esté equilibrada.

Sodio

El sodio en exceso produce hipercalciuria, la natruria arrastra el calcio y la hipercalciuria produce un balance negativo de calcio que va a acelerar la pérdida de masa ósea. Así podemos concluir que el exceso de sal es negativo para mantener la masa ósea.

Proteínas

Las dietas hiperproteicas por un lado producen hipercalciuria y por otro elevan el fósforo y el calcio queda en el intestino y va a producir un aumento de la resorción de hueso. Además las dietas hiperproteicas interfieren con la absorción intestinal de calcio y los niveles de IGF-1 y producen un balance total negativo para la salud del hueso. También producen una inhibición de la PTH, que es uno de los moduladores que favorecen el remodelado del hueso, así que no conviene frenar demasiado la PTH porque puede producir un efecto negativo sobre el hueso.

Fibra alimentaria

La fibra disminuye la absorción de calcio porque quela el calcio en el intestino. Sin embargo el consumo de cereales integrales en nuestro país es bajo.

Oxalatos

Los oxalatos de las coles, espinacas y alcachofas producen una quelación del calcio en el intestino y van alterar su absorción intestinal, por tanto recomendamos no tomar el calcio con estos alimentos.

Un trabajo del NEJM del 94 decía que la ingesta de calcio podía ser protectora porque el principal componente de la litiasis renal es la hiperoxaluria, por lo que si se da mucho calcio en la ingesta se puede quelar en parte la absorción de oxálico y disminuirlo en orina.

Magnesio

Cuando hay déficit de magnesio, fundamentalmente en alcohólicos por problemas de absorción intestinal o por hipermagnesuria (pérdida renal de magnesio) se puede dar una alteración secundaria a nivel de molecular, de la PTH, y producir hipocalcemia y alteración de la masa ósea.

La fuente fundamental de magnesio son los vegetales, cereales, brócoli, nueces… producir una hipomagnesemia por dieta es excepcional, pero hay situaciones clínicas como en la malabsorción intestinal o en los alcohólicos que pueden producir magnesio bajo y un trastorno secundario del calcio.

Vitamina C

Hay algún trabajo que dice que el uso de suplementos de vitamina C puede tener efectos beneficiosos y otro trabajo hablaba de que las mujeres postmenopáusicas que toman suplementos durante 12,4 años tenían un 3% más de masa ósea y por tanto quizás también en la prevención de osteoporosis.

La ingesta de frutas y vegetales ricos en magnesio también, según algunos trabajos, podía tener efectos positivos. Cuando se divide en cuartiles con respecto a la ingesta de potasio y magnesio los que tienen más ingesta de potasio y magnesio tienen más masa ósea medida en cuello femoral, en trocánter y triángulo de Ward, así como en radio. Hablamos de la posibilidad de que una dieta suplementada con potasio puede tener un valor positivo en la masa ósea y por tanto en la resistencia del hueso.

pH de la dieta

Las dietas hiperproteicas pueden tener una mayor acidosis metabólica y se ha demostrado que en estos casos se aumenta la resorción de hueso. A mayor ingesta de frutas y vegetales en el estudio de Framingham había mayor masa ósea.

Vitamina K

La vitamina K tiene un papel protector frente a la pérdida ósea relacionada con la edad, porque media la carboxilación de ciertas proteínas del hueso, como la osteocalcina. El aporte dietético de vitamina K a través de la filoquinona en los vegetales de hoja verde y en aceites vegetales puede tener un efecto positivo sobre la salud del hueso.

En el Nurses Health Study se mostró que la baja ingesta de vitamina K tenía mayor riesgo de fractura y en el Framingham Heart Study que la baja ingesta de vitamina K tenía mayor riesgo de fractura de caderas también en ancianos, aunque no había asociación con la DMO, quizás por la edad avanzada y los problemas de artrosis, etc. Y la cohorte de pacientes de Framingham con mayor ingesta de vitamina K se asociaba con mayor DMO y la baja ingesta con fractura.

Frutas y vegetales

En un estudio que midió la DMO y la evolución en 4 años de la cohorte de Framingham se demostró que el potasio y magnesio, a través de las frutas y vegetales, se asocia con una mayor DMO en las persona mayores siendo positivo en la prevención de la pérdida de masa ósea en estas persona.

La ingesta elevada de comidas alcalinas, frutas, vegetales y los minerales asociados, calcio y magnesio, se asocia a una DMO más alta, debido a que en parte tamponan la carga ácida de la dieta y por el aporte de elementos con factor positivo.

En general podemos decir que la ingesta de frutas y vegetales, fundamentalmente con ingestión de potasio, en estudios poblacionales ha demostrado que tienen mayor masa ósea en columna lumbar y en cuello femoral.

Energía

El bajo IMC es un factor negativo porque las personas delgadas, sobre todo las mujeres producen menos estrógenos en la grasa subcutánea. También sabemos que las mujeres que tienen trastornos de alimentación tienen amenorrea (en la mujer deportista ocurre), y tienen mayor osteoporosis por la mala ingesta proteica, en general.

Flúor

El flúor, aunque en estudios iniciales aumentaba la actividad de los osteoblastos y la masa ósea, se demostró en un ensayo clínico del año 1997 que el flúor sódico versus placebo aumentaba mucho la masa ósea pero era masa ósea de mala calidad que aumentaba las fracturas.

Fitoestrógenos

La soja contiene fitoestrógenos con efectos positivos a partir de una cantidad, previene en parte la pérdida de masa ósea, aunque no tanto como los estrógenos, y puede aumentar la DMO y disminuir la reabsorción.

Pero no sabemos el efecto a largo plazo ni que pasa con las fracturas hasta que no haya un estudio prospectivo o doble ciego en que se demuestre que disminuya la tasa de fractura. Aunque aumente la masa ósea no podemos darlo como una alternativa terapéutica pero sí sabemos que algunos efectos subrogados como la disminución de la resorción ósea, o el aumento de la DMO pueden ser datos positivos para la utilización de los mismos en la mujer menopáusica.

Cafeína

La cafeína aumenta la calciuria, altera la absorción de calcio y por tanto va a producir un balance negativo. También favorece la baja masa ósea y la disminución de la resistencia ósea.

Alcohol

En el alcoholismo crónico por diversos mecanismos: malnutrición, hepatopatías, acción directa del alcohol en los huesos, propensión a las caídas, hay más incidencia de fracturas y más osteoporosis. Pero en el estudio Framingham se demostró que los bebedores moderados (por algunos de los polifenoles del alcohol) tienen efecto positivo en masa ósea e incluso en fracturas.

Por su parte, la ingesta moderada de cerveza debido al alcohol, a la existencia de fitoestrógenos y sobre todo al sílice que contiene ha demostrado en estudios experimentales en animales, con osteoblastos en cultivo y masa ósea en humano e incluso en fracturas, que tiene un efecto positivo para mejorar la masa ósea y reducir las fracturas.

Y por último un estudio de nuestro grupo con animales de experimentación con un producto alimenticio que fundamentalmente tiene selenio demostró que mejoraba la masa ósea y los marcadores de formación.

Conclusiones

Además de los cambios en el estilo de vida (realizar ejercicio, evitar las caídas, etc.) hay que establecer una dieta equilibrada con una ingesta adecuada de calcio.

Y el mensaje final: No te rompas, cuida tus huesos.

Desayunar cereales ayuda a reducir el índice de masa corporal de los niños

Investigaciones previas ya habían relacionado la importancia del desayuno con el mantenimiento en el tiempo de un buen índice de masa corporal (IMC) pero este nuevo estudio, elaborado por la publicación regional Dairy MAX, de Texas, se centró en el papel concreto de los cereales en el peso y la alimentación de los niños, sobre todo en quienes tienen bajos ingresos.

Para ello, se hizo un seguimiento a 625 niños de San Antonio desde el cuarto al sexto curso, a quienes cada año se les pidió que recordaran lo que habían comido los tres días anteriores y se les calculó su IMC.

Mientras que el 64 por ciento de los estudiantes de cuarto grado dijo que había desayunado todos los días, cuando llegaron a sexto curso lo hacían el 42 por ciento.

Con datos de tres días al año durante tres años consecutivos, los investigadores contaban con nueve días para analizar el desayuno de cada niño. De este modo, se observó que los niños que comían cereales 4 de los 9 días tendían a estar en el percentil 95 del IMC, que se considera sobrepeso, en comparación con los niños que comían cereales los nueve días, cuyas medidas estaban en el percentil 65, en el rango de peso saludable.

Además, el 32 por ciento de los estudiantes de cuarto grado no se comían todo su desayuno y el 25 por ciento comían otros alimentos además de los cereales. En estos casos, huevos revueltos, pan de molde, salchichas o tortillas eran los alimentos más frecuentes.

El estudio también sirvió para constatar que los niños que comían más cereales tenían más vitamina D, B-3, B-12, riboflavina, calcio, hierro, zinc y potasio en su dieta. Asimismo, también tenían más calorías, grasa, fibra y azúcar.

Una de las autoras del estudio, Lana Frantzen, ha reconocido que el cereal “es una opción excelente para el desayuno, muy sencilla de hacer, y que aporta los nutrientes esenciales que necesitan los niños”.

reportaje_generica

Reducir la sal y el aumentar el potasio bueno para la salud mundial

Reducir el consumo de sal y, al mismo tiempo, el aumento de los niveles de potasio en la dieta tendrá importantes beneficios en los costos de salud en todo el mundo, según los estudios publicados en el British Medical Journal. Según los expertos, esta estrategia salvará millones de vidas cada año por enfermedades del corazón y derrame cerebral.

La evidencia muestra que una reducción de la ingesta de sal disminuye la presión sanguínea y, por lo tanto, el riesgo de accidente cerebrovascular y enfermedad cardiaca. Menos se sabe acerca de los beneficios potenciales de aumento de la ingesta de potasio, pero el consumo de alimentos bajos en potasio se ha relacionado con presión arterial elevada.

Por tanto, la Organización Mundial de la Salud ha establecido una meta mundial para reducir la ingesta de sal en la dieta a entre 5 y 6 gramos (aproximadamente una cucharadita) por persona al día para el año 2025. Sin embargo, la ingesta de sal en muchos países es actualmente muy superior a esto.

El primer estudio examinó los efectos de la reducción moderada de sal sobre la presión arterial, las hormonas y las grasas en la sangre (lípidos) de 34 ensayos que incluían a más de 3.000 adultos. Se encontró que una reducción moderada de la sal durante cuatro o más semanas dio lugar a caídas significativas de la presión arterial en personas que la tenían elevada o normal.

Sin embargo, los autores de esta investigación creen que las recomendaciones actuales “no son las ideales” y dicen que una reducción adicional a 3 gramos diarios “debe convertirse en el objetivo a largo plazo de la ingesta de sal de la población”.

Resultados similares se encontraron en un segundo análisis de 56 estudios, de los cuales 37 fueron investigaciones de alta calidad, sobre la presión arterial, los lípidos en sangre, los niveles de catecolaminas o función renal. Se encontró que la reducción de la ingesta de sal rebaja la presión sanguínea y no tiene efectos adversos sobre los lípidos en sangre, los niveles hormonales o la insuficiencia renal; además de que pruebas de calidad moderada en los niños también mostraron beneficios de la reducción de la ingesta de sodio en la presión arterial.

La baja ingesta de sodio se asoció con un menor riesgo de enfermedad coronaria y accidente cerebrovascular fatal en adultos. “La totalidad de la evidencia sugiere que la reducción de la ingesta de sodio debe ser parte de los esfuerzos de salud pública para reducir la presión arterial y enfermedades cardiovasculares, y es probable que beneficiará a la mayoría de las personas”, sentencian los autores.

Un tercer estudio analizó los datos sobre la ingesta de potasio, que se encuentra en frutas, verduras y legumbres frescas, y la salud en 33 ensayos que incluían a más de 128.000 participantes sanos. Los resultados muestran que el aumento de la ingesta de potasio reduce la presión arterial en adultos, sin efectos adversos sobre los lípidos en sangre, niveles de hormonas o de la función renal.

Una mayor ingesta de potasio se ha vinculado con un riesgo un 24 por ciento menor de accidente cerebrovascular en los adultos y también puede tener un efecto beneficioso sobre la presión arterial en los niños, pero se necesitan más datos. Los investigadores también sugieren un mayor beneficio de la ingesta de potasio con la reducción simultánea del consumo de sal.

reportaje_generica

Vitamina D. De la salud ósea a la salud general del organismo

A partir del descubrimiento de las denominadas vitaminas se conoce el papel que tiene la vitamina D en la curación del raquitismo. El profesor Elmer McCollum, que estaba investigando en vitamina A y había descrito la vitamina B, describe la vitamina D. En realidad no es una vitamina, él ya había postulado que no porque no era una amina vital. Además se puede adquirir por la dieta pero también mediante la irradiación de los rayos UV procedentes del sol.

Sistema endocrino de la vitamina D. ¡No es una vitamina!

Actualmente la seguimos llamando vitamina D pero en realidad es una preproprovitamina que va a formar 25-hidroxivitamina D y 1-25-dihidroxivitamina D, o la hormona D. Y se trataría en realidad de un sistema endocrino de la vitamina D.

Para que se sintetice por la acción de los rayos UV procedentes del sol es necesario que se tome directamente el sol sin cristales intermedios. En los meses de invierno a partir de paralelo 37 no tiene la capacidad de conseguir la síntesis.

También se puede adquirir por la dieta (por la irradiación de algunas plantas). En el hígado se va formar la 25-hidroxivitamina D, que es el metabolito más abundante, y nos sirve para cuantificar cuál es el estatus corporal de vitamina D.

Los sistemas de medición no discriminan bien entre vitamina D2 y D3 y a partir de ahora vamos a hablar de vitamina D cuando nos referimos al 25-hidroxivitamina D. En virtud de la situación homeostática del organismo para el calcio fósforo se va a formar el 1-25-dihidroxivitamina D que va a tener una acción fundamental, promover la absorción del calcio y la vitamina D y facilitar la mineralización del osteoide, del tejido recién formado del hueso.

Osteoporosis y osteomalacia

Cuando la deficiencia en vitamina D es profunda va a ocurrir una alteración en la mineralización y si la insuficiencia es mixta va a producir una alteración en la mineralización y mediante el hiperparatiroidismo secundario, que se produce para proveer el calcio necesario, una disminución de la cantidad y la calidad del hueso. Pero la deficiencia de vitamina D en su alteración de la mineralización lo que produce es osteomalacia y no osteoporosis, que es una disminución de la cantidad y la calidad del hueso, mientras que la osteomalacia es un hueso mal mineralizado.

Según el diccionario de la RAE osteoporosis es fragilidad de los huesos producida por una menor cantidad de sus componentes minerales lo que disminuye su densidad. Literalmente está definiendo la osteomalacia.

Los receptores nucleares de la vitamina D están dispuestos universalmente prácticamente en todos los tejidos del organismo donde la hormona va a ejercer sus funciones biológicas. Funciona igual que cualquier otra hormona esteroidea, va a entrar dentro de la célula y va a realizar diferentes acciones genómicas regulando (estimulando o reprimiendo) más de 400 genes en la totalidad de nuestro organismo. Regula la inmunidad, el crecimiento y el desarrollo tisular, modula la actividad cardiovascular. de manera que tener un estatus corporal adecuado de vitamina D es muy conveniente para la salud general de nuestro organismo.

Estatus óptimo de vitamina D

No disponemos de los métodos adecuados con la suficiente especificidad, sensibilidad y reproducibilidad para medir en la práctica clínica y en la investigación el 25-hidroxivitamina D de una manera adecuada.

Las recomendaciones que da el Instituto de Medicina lo colocan en un punto de 20 ng/mL mientras que la IOF (International Osteoporosis Foundation) lo sitúa por encima de 30 ng /mL. Esta recomendación ha sido la más avalada. Los niveles que consiguen las personas que se ponen al sol sin protección están entre 30-70 ng/mL.

Disponibilidad de vitamina D en España

Según un estudio las dos terceras partes de las mujeres postmenopáusicas que acuden a ser tratadas tienen insuficiencia en vitamina D e incluso después del tratamiento más del 60% siguen teniendo deficiencia en vitamina D.

Si el punto de corte lo ponemos en el 20%, es decir, en el rango casi de la osteomalacia, estamos hablando de que el 43% de nuestros pacientes siguen teniendo riesgo. Y esto también sucede en muchos países europeos y en EEUU, excepto en los países del norte de Europa donde se suplementa la alimentación con vitamina D. Y la mayor deficiencia es en los países que están más al sur de Europa: Italia, Portugal, Grecia y España. Con el envejecimiento se llega prácticamente al 100% de la población. Podríamos decir que nuestros ancianos necesitan tanto el sol como el afecto.

El sol es la principal fuente de irradiación pero esto puede aumentar el riesgo de cáncer de piel. Las causas de insuficiencia de vitamina D son la pigmentación en la piel, que los ancianos tienden a evitar el sol y que en el envejecimiento se sintetiza menos. También determinadas patologías como la obesidad y la malabsorción son una fuente de deficiencia añadida de vitamina D.

Fuentes alimentarias de la vitamina D

Las fuentes son fundamentalmente los pescados grasos, pescado azul, pero es difícil conseguir las 800 UI, cantidad recomendada diaria, por ello se debe acudir a la alimentación suplementada en vitamina D o a la administración farmacológica para normalizar los niveles.

Las encuestas de salud que se han hecho, fundamentalmente en Canarias y Cataluña, indican que la ingesta media es de no más de 200 UI cada día y en mujeres postmenopáusicas menos. Esto contribuye, junto con una carga genética especial, a que no todas las pacientes tengan los mismos niveles aunque sean sometidas a la misma alimentación y con la misma disponibilidad del sol.

Efectos óseos

Sobre el hueso conseguir unos niveles de 30 ng/mL nos permite una masa ósea adecuada, primero en la etapa juvenil, y después en la vejez para no perder demasiada masa ósea.

En el músculo pasa lo mismo, tenemos receptores para el 1-25 y además es capaz de sintetizarlo a partir del estatus corporal de vitamina D y con la acción autocrina paracrina, y esto va a ocurrir en el resto de tejidos.

En un metanálisis se evaluó la capacidad de disminuir las fracturas, el hecho de conseguir 40 ng/mL permite disminuir las fracturas entre un 18-21%. Si conseguimos mejorar la resistencia de la musculatura disminuimos las caídas y por consiguiente disminuyen al mismo tiempo las fracturas. Es necesario conseguir por lo menos 700 -800 unidades de vitamina D para que los resultados sean óptimos en cuanto a la reducción de fracturas no vertebrales y de cadera.

Es importante considerar que para que la vitamina D trabaje sola sin fármacos osteoactivos en la prevención del riesgo de fracturas debe administrase con calcio. En un metanálisis del grupo de Roger Bouillon ySteven Boonen, de la Universidad Católica de Lovaina lo deja claramente de manifiesto. Más importante todavía es el estudio el DIPART donde se estudiaron todos los pacientes uno a uno y se conseguía mediante la administración de vitamina D una reducción significativa de las fracturas de cadera. Y esa reducción era con muy poca vitamina D, 10 microgramos, si se aportaba calcio (unas 400 unidades de vitamina D).

Tratamiento de la osteoporosis

Todos sabemos que (la administración) de calcio y vitamina D está recogida en todas las guías terapéuticas de mundo, también las españolas. Cuando efectuamos tratamiento con fármacos osteoactivos antiresortivos si conseguimos repleccionar a nuestros pacientes con vitamina D (como ha demostrado el grupo de Adami de Italia) se aumenta la densidad mineral ósea. Pero ese no es nuestro objetivo sino que los pacientes se fracturen menos, y eso ocurre realmente. Cuando se hace el ajuste, los deficientes en vitamina D versus los repleccionados tenían más riesgo.

En dos trabajos de dos grupos españoles se ha demostrado que para los dos puntos de corte 20 y 30 ng/ mL si no se consigue que los pacientes lo superen va a haber una respuesta inadecuada a los fármacos. Por tanto es un objetivo inaplazable de la salud pública que los pacientes tratados de osteoporosis tengan unos niveles adecuados de vitamina D.

Efectos extraóseos

L a vitamina D tiene multitud de efectos extra óseos con un potencial adicional para la salud pública que los pacientes tengan niveles adecuados de vitamina D.

El 1-25 hidroxivitamina D va a ser capaz de entrar en multitud de células y por acción enzimática 1 alfa hidroxilasa, y no mediada por la acción de la hormona paratiroidea, va a ser capaz de estimular la formación de 1-25 de tal manera que es crítico que tengamos unos niveles adecuado para estas respuestas biológicas, como la inmunidad innata y adquirida, cáncer, psoriasis, hipertensión, diabetes mellitus I y II, esclerosis múltiple.

En cuanto a la respuesta antimicrobiana tiene una acción fundamental, aumentando la quimiotaxis, la fagocitosis. Cuando hay una cantidad adecuada de 25-hidroxivitamina D (por encima de 20 ng/mL) el organismo fabrica un péptido de 37 aminoácidos que se llama catelicidina, que es bacteriostático y bactericida.

También es capaz de regular la inmunidad adquirida, de tal manera que va a cambiar el perfil regulando la proliferación de TH1, disminuyendo la proliferación de la interleucina 1 y 2, interferón gamma, cambiando de TH1 a TH2, que es más protector para todas las enfermedades autoinmunes, y entre ellas la diabetes. En la diabetes va a regular todos los mecanismos vinculados con el desarrollo de la enfermedad, aumenta la secreción de las células betapancreáticas, y en la diabetes tipo 2 disminuye la resistencia a la insulina y la tolerancia a la glucosa.

Hay un estudio epidemiológico del grupo danés de Hyppönen, en Lancet 2001, donde se describía que los niños que habían tenido raquitismo en su infancia cuando llegaban a los 20-25 años multiplicaban por 3 el riesgo de padecer diabetes tipo I. Esto llevó al grupo del profesor Roger Bouillon a hacer un modelo semejante en ratones que espontáneamente desarrollaban la enfermedad a los que se les mantenía en insuficiencia de vitamina D y ausentes de la luz. Los ratones que eran deficientes en vitamina D desarrollaban la diabetes mucho antes y en todos disminuía de manera significativa cuando tenían adecuada disponibilidad de vitamina D.

En nuestro grupo hemos visto que pacientes que están en la UCI con niveles inferiores a 10 ng/mL cuando los tratamos con la cantidad adecuada de vitamina D hasta conseguir el nivel de normalidad (40-50 ng /mL) son capaces de recuperar la normalidad de la catelicidina. También en los pacientes hospitalizados de larga duración y, en general, para todos los ciudadanos.

Cáncer y vitamina D

La estimulación sobre el receptor de la vitamina D va a producir un fenómeno sobre la inhibición del crecimiento, la apoptosis celular (muerte celular no programada), la diferenciación celular y la antiinflamación. Todos los mecanismo vinculados con el cáncer, inflamación, invasión, proliferación, metástasis, apoptosis y angiogénesis, están relacionados directamente con la acción del 1-25 hidroxivitamina D.

Los estudios que relacionan al sistema endocrino de la vitamina D con el cáncer son estudios de asociación. En todos ellos tenemos una adecuada plausibilidad biológica pero no hay grandes estudios de intervención.

En un metanálisis, en el que han participado grupos españoles, se aprecia que conseguir niveles por encima de 30 ng/mL disminuye el riesgo de cáncer de colon. Existe una gran asociación inversa entre niveles de 25 hidroxivitamina D antes del diagnóstico y el riesgo de cáncer colorrectal en poblaciones españolas.

Psoriasis y vitamina D

La psoriasis es una enfermedad inflamatoria con alteración de la inmunidad donde el 1-25 es capaz de disminuir la proliferación celular y el desarrollo de la enfermedad. Los análogos de la vitamina D demuestran su eficacia y se está investigando sobre ello.

Sistema cardiovascular y vitamina D

Con relación al sistema cardiovascular tiene efectos sobre el miocardio, sobre vasos y factores de riesgo cardiovascular, pero hay pocos estudios de intervención.

Los estudios de asociación en HTA muestran que los primeros eventos cardiovasculares van a aparecer mucho antes en pacientes con franca deficiencia de vitamina D (

Respecto a la diabetes tipo 2 hay un estudio donde niveles adecuados (>30-40 ng/mL) son exactamente iguales en eficacia para aumentar la sensibilidad de la insulina que la metformina.

Por tanto sabemos que un estatus deficiente en vitamina D nos va a colocar en una situación de aumento de riesgo de morbimortalidad y al normalizar el estatus de vitamina D vamos a conseguir una mejoría clínica, de tal manera que se ha visto en un estudio que el riesgo de muerte disminuía un 13%. Por lo tanto, para terminar como dice el refrán: “donde entra el sol no entra el médico”.

reportaje_generica

La conectividad funcional como modelo para entender las enfermedades neurológicas

Voy a intentar explicar un modelo, diferente al tradicional que se está haciendo en neurociencia, para entender el funcionamiento del cerebro. Se trata de un modelo basado en redes y no en áreas.

Ha predominando, debido a los hallazgos en neuropsicología y en neurociencia en general, la idea de que lesiones en diferentes regiones del cerebro producían síntomas cognitivos específicos: amnesia, afasia, disfunción ejecutiva… y esto llevó al establecimiento de lo que conocemos como las dobles disociaciones. Y los métodos de estimulación cortical intraoperatoria, o incluso los mapas histológicos, llevaron a pensar que existía este tipo de especializaciones muy concretas en regiones concretas del cerebro. Este ha sido el modelo predominante durante 3-4 décadas pero en los últimos años ha empezado a cambiar la idea.

En general decimos que en el lóbulo frontal están la funciones ejecutivas, en el lóbulo parietal el cálculo, las praxias, el módulo fonológico y la memoria operativa, etc. Establecemos este tipo de mapas. Así que es realmente difícil pensar si podemos establecer otro concepto totalmente diferente en el que no tenemos regiones que tienen un protagonismo funcional, sino que tenemos redes que tienen un protagonismo funcional. El cambio es cualitativamente y cuantitativamente enorme. No decimos que hay una función en un área, sino que hay neuronas colaborando entre sí para generar una función.

Este modelo tiene una ventaja muy interesante, que nos hace mucho más plásticos y versátiles. Según el modelo anterior si pensamos en una lesión en una región con una función concreta provoca la pérdida de dicha función y no habría posibilidad de recuperación o rehabilitación. Sin embargo si estamos pensando en regiones que colaboran entre sí con una acción exponencial entre ellas, que generan función, la reorganización de la red podría provocar la recuperación funcional del sujeto.

Nuestra idea (y la de mucha gente) es ver la reorganización de redes. Voy a utilizar ejemplos de lo que nosotros estudiamos para intentar evidenciar que este modelo puede ser útil para entender enfermedades.

Magnetoencefalografía (MEG)

Esta técnica tiene algunas ventajas, por ejemplo combina bien la dimensión espacial, tiene una resolución espacial relativamente aceptable, una resolución temporal buena y una situación de registro que es importante en la tareas cognitivas, y mide la actividad neuronal de forma directa lo cual es interesante porque nos permite acceder al lenguaje que utiliza el cerebro para comunicar información.

El cerebro se divide en grupos neuronales que disparan a frecuencias determinadas para poder filtrase y comunicarse información y evitar el ruido de las otras comunicaciones que en paralelo surgen. Estos análisis de frecuencia nos permiten tener acceso a lenguajes que estaban poco explorados como los lenguajes de comunicación del cerebro.

Es una técnica no invasiva que registra lo que de forma natural emite el cerebro, que son campos magnéticos. Es una técnica aceptablemente útil para medir actividad neuronal.

Para responder a la pregunta ¿dónde está una actividad del cerebro? Lo mejor es utilizar resonancia magnética funcional pero para seguir la actividad cerebral milisegundo a milisegundo no la podemos usar porque la RM lo mide cada segundo, por lo tanto perdemos información. El EEG, el MEG y los electrodos profundos consiguen una resolución temporal ideal para seguir la actividad cerebral y podemos seguir el procesamiento de la información en tiempo real.

Además hay técnicas que son más invasivas, sobre todo los electrodos profundos, pero las técnicas de medicina nuclear y de resonancia tienen cierto grado de invasilibidad.

Principios del campo magnético

El campo magnético no lo frena nada, ni los edificios ni las personas. Lo único que lo frena es el cuadrado de la distancia (cuanto más lejos estoy de un campo magnético menos radiación). Si es verdad que dos campos magnéticos en direcciones opuestas se cancelan y esto ocurre con cierta frecuencia en el cerebro en algunas zonas.

La técnica registra campos magnéticos muy débiles (del orden de femtoteslas), que lo generan corrientes intracelulares, las que van por dentro de la dendrita apical de las neuronas piramidales.

No medimos sustancia blanca porque el axón tiene un potencial de acción muy rápido, sin embargo el potencial postsináptico dura decenas de milisegundos y da una oportunidad para que otras dendritas sumen sus campos. Aproximadamente necesitamos 10.000 células activas electrónicamente para poder ver el campo magnético en el exterior. En definitiva lo que veríamos sería una corriente eléctrica que genera un campo magnético que lo podremos observar en el sensor, atravesará todas las estructuras y los detectores de campo en el exterior podrán captarlo.

En el cerebelo las células de Purkinje tienen diferentes dendritas y como cada una tiene una orientación de campo distinto se cancelan. Por tanto son estructuras muy ciegas para observarlas con esta técnica. Hay células pocas células piramidales en el cerebelo. Y tenemos que conseguir actividades muy robustas para poder observarlas.

El gran problema del MEG es el ruido externo. El ruido medio ambiental es de un millón a billón más intenso que el de la señal cerebral. Los pacientes se sitúan en cámaras aisladas que desvían el campo gracias a un material que se llama Mu metal (desvía el campo pero no lo frena, por lo tanto parte del campo entrará). Se colocan 306 sensores por toda la convexidad craneal para medir la actividad que se produzca.

La MEG necesita que sus sensores estén a temperatura superconductora (269 grados bajo 0) y esto es lo que hace que el coste del sistema sea elevado, porque la corriente que se genera es muy pequeña. Podemos hacer estimulación somato sensorial, visual, auditiva, para los registros de tareas cognitivas. Lo que se ve en el registro son oscilaciones.

La propiedad interesante de esta máquina es que nos permite reconstruir desde fuera, desde el registro del campo magnético, qué corriente eléctrica dentro del cerebro generó ese campo. Es una propiedad específica de algunos equipos de MEG. Podemos decir dónde están las corrientes eléctricas que generan patrones específicos que observamos en el exterior y esto nos permite hablar de zonas del cerebro que están o no funcionando ante tareas concretas.

Así pues, con MEG tenemos la posibilidad de empezar a establecer medidas de conectividad, cómo se comunican entre sí las diferentes zonas del cerebro. Y empezar a hacer análisis de las arquitecturas de la red: cómo están organizadas, si es de manera eficiente o ineficiente, a través de procedimientos que se llaman de teoría de grafos. No interesa saber si un lóbulo y otro están conectados sino si la red está organizada de manera adecuada y si procesa bien la información, para explicar mejor la organización funcional del cerebro.

Conectividad funcional

Durante décadas nos hemos preguntado dónde están y ahora queremos saber cómo dependen en las funciones de relaciones entre áreas cerebrales. Hay un modelo de segregación funcional, las áreas primarias del cerebro están superespecializadas (somato sensoriales, motoras…), pero cuando se abandonan las regiones primarias no hay tanta superespecialización. De hecho anatómicamente se observa una interrelación enorme entre diferentes regiones del cerebro. Es cierto que existe la segregación en regiones primarias pero en zonas secundarias o terciarias hay más integración funcional.

Esto se mide mediante algoritmos de conectividad funcional, que es la dependencia estadística entre dos series temporales, series temporales que vemos como se sincronizan sus señales para trabajar conjuntamente y elaborar cognición. Hay otras medidas de conectividad efectiva que indican cuál es la direccionalidad del flujo de la información pero éstas están basadas sobre todo en medidas de la economía.

En resumen, ¿tenemos áreas funcionalmente especializadas o realmente tenemos redes que entre sí colaboran? Con MEG podemos ver las oscilaciones de las diferentes zonas y calcular su grado de sincronización o trabajo entre ellas y por tanto asumir una dependencia estadística. Con los modelos animales, por ejemplo lesiones en la serie temporal producen cambios en la dinámica de las otras series, y se demuestra que existe una dependencia funcional entre ellas.

Se pueden usar muchos modelos matemáticos, por ejemplo la Synchronization Likelihood, en el que en una serie temporal se observa en repetidas ocasiones un patrón oscilatorio determinado y siempre que aparece este patrón puede aparecer otro totalmente distinto en un análisis de relación entre frecuencias, de tal manera que hay una coincidencia temporal y asumimos que producen relaciones entre áreas funcionales. Todo esto se puede estudiar desde el punto de vista de la conectividad anatómica.

Reorganización funcional en TCE

Nos interesaba conocer cómo el tratamiento no farmacológico, cognitivo, modificaba o no la organización de las redes en personas que habían sufrido un traumatismo craneoencefálico (TCE). Cuando se planteó este estudio no había evidencia neurofisiológica del cambio provocado por la intervención cognitiva (ejercicios de gimnasia cerebral) ni qué tipo de cambios producía a nivel de la arquitectura de la red.

Los pacientes del estudio tenían un TCE muy severo e iban a ser sometidos durante un año a una intervención cognitiva de tres sesiones semanales. En los casos graves de TCE se produce daño axonal difuso, es decir, en todo el cableado interno del cerebro hay un daño importante y podríamos, por tanto, conceptualizarlo como un síndrome de desconexión. Los daños cognitivos se producen porque las regiones cerebrales ya no están comunicando de manera efectiva la información. Así, era una buen manera de evaluar nuestras ideas de conectividad con un síndrome que tiene ruptura de las conexiones anatómicas entre diferentes regiones del cerebro. El estudio duró 10 años.

Los estudios de tensor de difusión demuestran que hay un daño en la sustancia blanca en múltiples regiones con diferente grado en pacientes con TCE. Se hizo un registro antes y después de la intervención cognitiva para comparar cada fase con la representación de actividad de un grupo control (no podía haber un grupo sin tratamiento porque se sabe que la rehabilitación cognitiva es beneficiosa para estos pacientes). Se estudió el número de conexiones funcionales que se producen entre los nodos del cerebro, la fuerza, la intensidad de conexión y la topología de la conectividad. Se observó la conectividad de las diferentes regiones a través del espectro de frecuencias para observar sus comunicaciones.

La evaluación neuropsicológica es el gold estándar para demostrar que mejoran los pacientes. Se les hicieron antes y después de la rehabilitación diferentes pruebas cognitivas y se observó como las puntuaciones mejoraron en la mayor parte de los test.

Se elaboraron unos mapas que indican la distancia con respecto al grupo control estadísticamente. Y se evaluó la conectividad entre diferentes regiones a corta -intralobar- y larga distancia. Se vio es que antes de la rehabilitación neuropsicológica había un incremento en la conectividad en banda delta, estaban hipersincronizados en una banda de frecuencia muy patológica, y probablemente esto impedía una comunicación correcta. En cambio la rehabilitación neuropsicología inducía una pérdida de la conectividad, se acercaban más al grupo control, que tenía menos conectividad en banda delta. En general las conectividades en banda delta se reducían, y por tanto, es un buen signo porque indica una pérdida de conectividad de una banda que no es habitual en la comunicación.

Sin embargo en las bandas de frecuencia rápida ocurría algo diferente. Había una pérdida antes de la rehabilitación de la conectividad en estas bandas y la rehabilitación inducía un incremento de la conectividad en las bandas de frecuencia rápida.

¿Por qué son tan interesantes estas bandas de frecuencia rápidas? A larga distancia el cerebro utiliza bandas de frecuencia muy rápida para no permitir que otras señales interfieran. Pero todo esto no tendría ningún sentido si no hubiese una correlación con las pruebas neuropsicológicas, que son las que están evidenciando realmente los cambios en la vida diaria. Se hizo una correlación entre las pruebas funcionales, las neuropsicológicas y las actividades de la vida diaria para saber si había relación o no. Y encontramos que aquellas personas que entre la fase prerehabilitación y la postrehabilitación no habían mejorado en memoria operativa eran los que no habían conseguido conectarse en banda alfa. Sin embargo las que habían incrementado su conectividad en banda alfa eran las que tenían mejores puntuaciones en las tareas de memoria operativa. Así que a más conectividad en banda alfa, más rendimiento en la memoria operativa. Sí que había una relación directa entre reconectarse el cerebro en esas bandas de frecuencia rápidas y tener mejores puntuaciones en pruebas cognitivas.

Ocurría lo mismo (pero al contrario) en la banda delta. Para mejorar la inteligencia hay que desconectarse en banda delta. Las personas que no habían conseguido desprenderse de esas conectividades en banda delta eran los que mantenían unos CI más bajos después de la rehabilitación. En cambio los pacientes que habían conseguido perder conectividad en banda delta eran los que habían incrementado más su CI en actividades verbales específicamente.

Pero fuimos un poco más lejos: vamos a ver si la red es más eficiente procesando información que antes de la rehabilitación. Y esto se hizo con la teoría de grafos. A un matemático llamado Leonhard Euler le pidieron en su ciudad si se podía pasar cruzando los puentes sólo una vez. Él hizo sobre un papel unos grafos, unos nodos, que son las zonas ABCD de la ciudad y unas conexiones que son los puentes y concluyó que era imposible resolverlo. No se puede cruzar todos los puentes sólo una vez y visitar todas las zonas de la ciudad. Y lo hizo con la teoría de grafos. Esto se aplica para organizar las líneas aéreas.

Hay modelos de red que se llaman de mundo pequeño, en los que hay una alta clusterización, todos los sistemas se autoorganizan para tener un modelo de comunicación de información de mundo pequeño. Éste es el modelo de eficiencia absoluta de procesamiento de información en cualquier sistema natural, así que si se produce en el cerebro es que es eficiente. ¿Y cómo es la arquitectura de la red? ¿Es eficiente o no? ¿La rehabilitación neuropsicológica me lleva de pasar a una red eficiente? Hay unas zonas de alta densidad de conectividad que producían los cambios de la red inducidos por la rehabilitación neuropsicológica. El incremento de su protagonismo en conectividad mejoraba la eficiencia de la red.

En banda delta hay una red totalmente aleatoria y su reorganización a una red de más clusterización producía la rehabilitación neuropsicológica y la banda alfa es muy poco conectada, demasiado clusterizada, y la rehabilitación inducía una red de tipo de mundo pequeño. La intervención cognitiva lleva a que la red sea más eficiente procesando información con independencia de que áreas se conecten.

Enfermedad de Alzheimer

El Alzheimer es una enfermedad de enorme coste social y con gran número de personas afectadas. Hay avances en terapia pero el diagnóstico es problemático. No hay un biomarcador no invasivo, hay muchos marcadores en neuroimagen, algunas técnicas miden muy bien la acumulación de beta amieloide, la pérdida de glucosa o la pérdida de actividad funcional, o de atrofia de determinadas estructuras, pero ninguno está ofreciendo una medida de cómo se organiza la red.

La acumulación de beta amiloide ocurre entre 20-30 años antes de que aparezcan los síntomas, es decir, en ese periodo de tiempo la red tiene que estar alterándose funcionalmente y puede ser observada por medidas funcionales. Podríamos medir sus campos magnéticos.

En el deterioro cognitivo leve (DCL) los pacientes tienen un problema de memoria en los test neuropsicológicos y un 10-15% de riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer al año. Medir a estas personas nos permitiría tener modelos de predictores del desarrollo de la enfermedad.

Hipótesis de la desconexión

Bajo la idea de que la fosforilización de la proteína tau lo que suele hacer es destruir la arquitectura del axón y por tanto se pierde capacidad de comunicación y la acumulación de beta amiloide también impide que las neuronas se conecten o hagan sinapsis de manera eficiente, es decir, que podemos pensar que nuestro modelo podía ser útil en el estudio de esta enfermedad. Según el tensor de difusión se ve que los enfermos pierden la conectividad anatómica, en el deterior cognitivo un poco más y el control tiene una conectividad normal.

En un primer trabajo se midió la conectividad. En el DCL se vio que incrementaban la conectividad respecto al grupo control, es decir, es una fase de la enfermedad en la que parece que el cerebro intenta defenderse ante lo que está ocurriendo y aumenta la conectividad en diferentes bandas de frecuencia. Y lo hace específicamente en banda alfa y en el lóbulo frontal.

En una muestra de 19 pacientes, 16 tenían el patrón de hiperconectividad en la región prefrontal. Posiblemente hay una activad compensatoria en las regiones ventrales, en la zona dorsal no aparece más actividad que los controles pero la vía ventral (que reconoce información) el hipocampo, es decir, estructuras de memoria están hiperconectadas en estos pacientes.

¿Quién desarrollará demencia? Se hizo el seguimiento de 20 personas con DCL durante 2,5 años para ver quién desarrolla Alzheimer y decidir si tenemos un buen modelo predictor de la enfermedad. Y encontramos que las personas con DCL que después desarrollaban demencia tenían una hiperconexión en cluster aislados en lóbulo parietal y en el frontal, dos clúster aislados sin comunicación entre sí en dos zonas distintas del cerebro (justo donde se acumula más beta amieloide) . De hecho lo que más se atrofia es el precuneo y la región ventral prefrontal, donde encontramos esta hiperconectividad.

Nuevamente hicimos un estudio de red para ver si esas redes eran o no eficientes, si es aleatorio o de mundo pequeño, para ver si realmente es o no compensatoria. Y descubrimos que los controles tenían una organización de tipo pequeño mundo pero los pacientes habían perdido totalmente la clusterización, es decir, la red era totalmente aleatoria. Así que esa red no es compensatoria, está demostrando una alteración funcional.

Quejas subjetivas de memoria. Otro experimento

Hay personas que dicen tener problemas de memoria pero van al médico, se hacen unas pruebas neuropsicológica y éstas salen bien. En ese estado en el que las pruebas estándar no tienen sensibilidad suficiente podemos mirar si neurofisiológicamente ya está habiendo modificaciones de la red. El estado de DCL aparece tarde y la demencia más tarde pero cuando realmente empiezan los síntomas es antes y el amiloide también se acumula mucho tiempo antes. Y llega a estados en los que podemos mediarla de manera muy eficiente cuando el cerebro ya está muy afectado.

¿Podemos ver en el estadio de quejas subjetivas si hay algún patrón neurofisiológico? Las pruebas de memoria episódica, sobre todo de recuerdo a largo plazo en el DCL están muy mal, pero en las quejas subjetivas están tan bien como en el control. No hay evidencia de enfermedad. Neurofisiológicamente observamos que cuando comparamos al grupo control con el de quejas, el grupo control estaba más conectado y con una red más eficiente que el grupo de quejas subjetivas. Y llegamos a este modelo: cuando comienza la enfermedad perdemos conectividad, cuando progresa a DCL incrementamos para perderla completamente en Alzheimer. Pero es interesante ver que los que progresan a demencia son los que más hiperconectan el cerebro, por lo tanto esto nos permite tener ciertos “marcadores” de la enfermedad.

Hay un proyecto entre muchos centros de magnetografía del mundo que registran pacientes con DCL y nos mandan las señales sin conocer el diagnóstico (controles, Alzheimer y DCL) y en base a este modelo tenemos que clasificarlos. Tuvimos hasta un 84% de acierto en el diagnóstico, con lo cual parece que el modelo es relativamente útil. Lo cual nos hacer pensar que extendiendo este experimento podríamos tener un biomarcador adecuado de la enfermedad.

Conclusión

Podemos entender la función del cerebro como la colaboración entre millones de neuronas, que serían como bits de información que sumados exponencialmente generan un sistema que funciona a 4 vatios y con una capacidad enorme de procesar información, y esto con conectividad se puede evaluar mejor.

reportaje_generica

Verduras y pescado ayudan a mejorar los síntomas de la menopausia

Así, el Dr. Andrés Forteza, coordinador de la reunión, explica que “las mujeres en esta edad deben cuidar mucho su salud, comenzando por la alimentación, comiendo cantidades adecuadas para mantener el peso por debajo de los índices de obesidad, lo que equivale a un Índice de Masa Corporal por debajo de 30”.

Los consejos dietéticos durante esta etapa de la mujer adquieren aún más relevancia, ya que, según el Instituto Nacional de Estadística, casi una de cada cuatro mujeres españolas en edad menopáusica presenta problemas de obesidad, debido en parte a la disminución de estrógenos que ocasiona modificaciones en la distribución de la grasa corporal.

No obstante, los expertos coinciden en afirmar que “uno de los mayores problemas asociados a las dietas es la escasa adherencia a largo plazo”. La dieta mediterránea presenta en este aspecto una ventaja para su seguimiento, ya que puede conseguir una pérdida de peso similar a otras dietas cuando se restringen las calorías y con un mejor control glucémico. No obstante, independientemente del régimen escogido, los expertos insisten en que estas dietas deben asegurar la cobertura de las necesidades diarias de calcio y vitamina D.

La práctica de ejercicio físico de forma habitual es otra de las recomendaciones fundamentales. “El ejercicio debe adecuarse a las características físicas de cada persona. Es suficiente caminar al menos 30 minutos cinco veces por semana”, explica el Dr. Forteza.

Precisamente, uno de los principales objetivos de la Reunión Hispano-Lusa es hacer énfasis en las recomendaciones de un estilo de vida saludable en esta fase de la vida desde el punto de vista ginecológico, sexual, cardiovascular y de calidad de vida en general. “Consideramos de gran importancia mantener la colaboración con profesionales de otros países, ya que nos permite contrastar y compartir experiencias sobre una misma problemática desde puntos de vista diferentes”, comenta.